Temeroso de ser agredido en la vía pública, Miguel Alejandro "N" toma valor para denunciar públicamente las difamaciones y acusaciones de las que ha sido víctima a través de redes sociales.

Desde noviembre del año pasado es objeto de publicaciones en las que se le acusan desde maltrato animal, compras fraudulentas, hasta pedofilia, las cuales asegura son completamente falsas.

"Estuvieron circulando en redes sociales mi imagen y mi foto a través de una cuenta que no fue mía" dijo el joven de 25 años, quien precisó que "las publicaciones que se hicieron a mi nombre se debió a una persona que se hizo pasar por mi y todas las fotos que tomó las sacó de contexto".

Las publicaciones mediante la usurpación de su identidad comenzaron en noviembre del 2018 que se acusó de maltrato animal, en marzo de compras fraudulentas de ropa de mujer y últimamente de pedofilia.

"La persona que posible está detrás de esto es un tal Cristian, ex novio de una amiga, ya que me acusa de haberla aconsejado que lo cambiara, pero mi amiga Liliana tomó la decisión" expuso en entrevista.

Han sido de 7 a 10 publicaciones que han permanecido expuestas de dos horas hasta una semana, "cada una tuvo un impacto muy fuerte en mi persona y en mi vida, ya que con tantas publicaciones muchos pensaron que era verdad".

COMENTARIOS DE ODIO

Los señalamientos de ataques a animales y acosador de niños generó comentarios de odio e incluso amenazas por medio de las redes.

"Eran comentarios de amenazas, algunos de querer dar conmigo con la Policía Cibernética, la PGR, con diversos medios para dar conmigo, a pesar que no había pruebas" expuso el entrevistado.

Los señalamientos de maltrato animal generaron amenazas las cuales subieron de tono al acusarlo de pedofilia "la gente se sintió con más interés de dar conmigo y establecer acción legal contra mi por este tema muy delicado que indigna".

Convocó a las autoridades a revisar las cámaras de videovigilancia de un centro comercial para establecer la realidad "lo pueden hacer y podrán saber que la persona no soy yo y podrían ver la persona que esta tomando esas fotografias".

SIN POSIBILIDAD DE DEMANDAR

Desde que comenzó este suplicio Miguel Alejandro N ha intentado establecer acciones jurídicas contra quien usurpó su identidad e hizo acusaciones en su contra.

"Lamentablemente me dijeron que no había ninguna acción legal que proceder, ni nada que se pudiera hacer ya que la difamación ya no se considera un delito en Tamaulipas" expuso.

EN RIESGO SU VIDA

El tampiqueño considera que su integridad e incluso su vida está en riesgo por el malestar generalizado generado por las acusaciones.

"Mi vida estaba en peligro, mi imagen estaba expuesta, la gente piensa que era yo quien estaba amenazando a las personas, a los niños, a los animales y no puedo hasta el momento hacer nada aunque estén usurpando mi identidad, aunque estén publicando con mi nombre, utilizando mis fotos, no hay ningún crimen que perseguir porque sigue siendo una difamación y si es una difamación en Tamaulipas no hay delito que perseguir" puntualizó.

El miedo en su andar es evidente, pese a estar seguro de que no fue él quien efectuó esas publicaciones o incurrió en los señalamientos hechos "aunque se ha comprobado mi inocencia y que no soy quien esta detrás de ese perfil igual tengo miedo de las represalias".

Pese a ello opta por dar la cara y decir la verdad "decir las cosas claras y lo que tenga que suceder que suceda pero yo ya expuse mi caso, lo dije con mis palabras estoy hablando de frente a ustedes y las personas que me están viendo, que se den cuenta que un difamador, un pedofilo, alguien que maltrata animales no estaría dando la cara y su propia versión de los hechos".

"Si fuera todo lo que se me está catalogando no estaría aquí hablando frente a los medios y no como las personas que están hablando en la pantalla -de redes sociales, en el anonimato y a través de miles de publicaciones que nada prueban y nada dicen" concluyó Miguel Alejandro.