A pesar de la disposición del gobierno de Tamaulipas para que personas de la tercera edad y estudiantes tengan un descuento en el pago de tarifas del transporte público, diversas rutas no respetan la normatividad y cobran completo el pasaje sin hacer válidas las credenciales, además que, de acuerdo a los usuarios, dan maltrato a quienes cuestionan esta violación a la ley.
"Se supone que las unidades que no son autos, tienen que cobrar la mitad con la credencial de estudiante o del Inapam, pero las combis y algunos microbuses no respetan esta norma, además si uno pregunta le contestan de mala manera, es una situación que se está generalizando, pues en varias de las rutas que manejan este tipo de unidades no quieren cobrar lo que dice el gobierno".
Expuso el señor Gregorio Montalvo Zúñiga, integrante de la Casa del Adulto Mayor "Amigos", quien menciona que la queja es generalizada entre las personas de la tercera edad, pues rutas como Madero-Tancol, Portillo-Carnitas Orta, Cañada, entre otras, no respetan las tarifas especificadas para este sector de la población, "es injusto o para que dan la tarjeta si no la van a hacer válida".
"En las combis meten gente de pie y es imposible caminar si uno tiene que bajar, es muy peligroso lo que están haciendo, porque se puede tener un accidente, que es lo más probable, pues el chofer no tiene la visibilidad que debe ser, las personas tapan espejos y no ve cuando bajan. Esto es muy grave porque circulan a alta velocidad y los pasajeros no hayan cómo agarrarse", añade.
Exigió que se aplique la ley, tanto para el cupo máximo como el respeto a las tarifas establecidas para ciertos sectores en las unidades colectivas del transporte público, "es por ley y deben de aplicarse, si no para qué están las autoridades si cada quien va a cobrar lo que quiere y no van a respetar lo que el gobierno dice o para qué uno tiene que hacer fila y sacar la credencial del Inapam si nadie la va a respetar".
Hace unos días un pasajero de la tercera edad cayó de un microbús al resbalar cuando trataba de enseñarle la tarjeta del Inapam al chofer, que se la exigió a pesar de ver su condición de persona mayor, situación que puede repetirse al no respetar el cupo en el transporte público.