Los días están contados para el edificio que desde hace 69 años es la sede de la Administración Portuaria Integral de Tampico. Fue declarado inhabitable y en unos meses deberá ser desocupado y derrumbado.
Peritajes practicados por la API, reforzados con ingenieros especialistas de una compañía privada determinaron que las columnas del inmueble ya no tienen resistencia y que factores como los efectos de los intensos sismos del 19 de septiembre pasado empeoraron su estructura, ya amenazada por la salinidad y los asentamientos propios del terreno, aseguró el director general Eduardo Rafael Luque Altamirano.
Otro diagnóstico lo ejecuta ya la compañía aseguradora Inbursa, la cual en quince días más dará los resultados del dictamen y si es distinto, deberá buscarse a un tercero. Aunque por ahora ya han invitado a la Capitanía Regional de Puerto de Tampico a que inicie la búsqueda de nuevas oficinas.
El peritaje ahora sobre el estado de la construcción, es que no es habitable e indica que debemos dejarlo, por si existiera algún temblor, desplazamiento o hundimiento pudiera caerse
Director general Eduardo Rafael Luque
Desconoce cuánto costará la edificación de una nueva sede, pero dijo que será Inbursa la responsable de dotar de una nuevo inmueble que al igual que todos los de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes están protegidos por coberturas contra daños.
De tres pisos, una plantilla de 120 empleados y el aforo diario de cientos de visitas que acuden a hacer trámites para el ingreso y salida de buques mercantes, de mercancías y otros muchos a la Capitanía Regional de puerto, aumentan la presión sobre el edificio llamado también "ballena".
Hace dos años recibió algunas rehabilitaciones e incluso se le redujo peso en la terraza, derrumbado un salón y solo dejando en operación la cocina, sin embargo la estructura principal ya está dañada y por ahora el llamado es que " mientras antes te vayas es mejor", lo que obliga a buscar a reubicarse la sede de API.
En ese periodo, el entonces director de API, Jesús Orozo Alfaro, ya consideraba la destrucción de esa estructura, como parte del proyecto de reconversión turística del puerto.
EN BUSCA DE NUEVO EDIFICIO
Dijo que por ahora sigue el proceso con la aseguradora, que si considera o no si habrá que demolerlo y levantar uno nuevo, pero a la Administración Portuaria Integral le toca reubicar sus oficinas, aunque en las instalaciones portuarias no hay lugar y tampoco hay mucha oferta en el exterior.
Luque Altamirano añadió que no les han dado plazo para abandonarlo, pero ya iniciaron la búsqueda de su nueva sede, que deberá quedar cerca de la zona portuaria para facilitar los trámites a todos los usuarios.
HISTORIA
Este inmueble fue inaugurado en diciembre de 1948, siendo presidente de la República Miguel Alemán Valdés y Secretario de Marina, el Comodoro David Coello Ochoa.
De acuerdo con la placa de bronce en el primer piso entre las escaleras, indica que el edificio fue comenzado a construir por el régimen administrativo del Gral. Manuel Ávila Camacho.
Una crónica del capitán Manuel Aceituno Rodríguez, exjefe de la Capitanía Regional del Puerto de Tampico, señala que las oficinas federales que han funcionado en este edificio son la Primera Zona Naval, Pesca, Dragado, Obras Portuarias, Puertos Mexicanos, y el Hospital de Marina, pero desde el inicio de sus actividades, siempre ha estado la Capitanía de puerto.
Actualmente, el edificio de dos niveles lo comparten la Capitanía de Puerto en el primer piso y la Administración Portuaria Integral de Tampico, y hay un tercero que es mirador y comedor .
El edificio se diseñó originalmente al estilo Art Deco, pero en 1998, el edificio fue remodelado en su totalidad, en un estilo minimalista
Posee una amplia escalera central, un mural de cerámica que representa el progreso marítimo del puerto de Tampico, desde la época de la conquista en una carabela; pasando por buques de paletas laterales de vapor, de principios de siglo, hasta modernos buques de carga, así como el esfuerzo del trabajador de alijadores.
LUGAR DE FIESTAS.
En el edificio de la Secretaría de Marina se disfrutaron alegres fiestas llevadas a cabo en dicho lugar, que gratuitamente cedía la Secretaría de Marina, para festejar principalmente las campañas de los candidatos a reina y rey feo de carnestolendas y posteriormente los días de carnaval, durante los cuales y después de los desfiles que se hacían en las principales calles de la ciudad y en renombradas plazas porteñas, la alegría concluía en los bailes de “la Ballena”, nombre que le habían sobrepuesto los organizadores de estos festejos del Dios Momo.
Durante los festejos a los cuales nos estamos refiriendo, desfilaron por los salones de ese edificio, los más destacados y renombrados artistas nacionales e internacionales de esa época, quienes eran contratados por los organizadores de dichos eventos, a fin de que en los intermedios actuaran para el público asistente.