Conjuntando esfuerzos con la Secretaría de Salud de Tamaulipas y el área de Vectores de la Jurisdicción Sanitaria Número 12, el gobierno municipal de Altamira, que preside la alcaldesa Alma Laura Amparán Cruz, mantiene sus acciones que generan bienestar y salud a través de jornadas de descacharrización y fumigación que se llevan a cabo tanto en el área urbana como en la zona rural.
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La jefa edilicia estuvo este jueves en la colonia El Nogal encabezando esas labores de limpieza y desinfección consistentes en la recolección de toda clase de cacharros viejos y llantas en desuso, las cuales se complementaron con la fumigación del sector para eliminar la proliferación de moscos transmisores de enfermedades como dengue, zika y chikungunya.
Amparán Cruz, acompañada del director de la clínica del DIF Altamira, Juan Martín Compean Ramírez, así como representantes de la Jurisdicción Sanitaria Número 12, y del área de Vectores, supervisó esas labores señalando que a la fecha se han efectuado jornadas de descacharrización y fumigación en más de 120 colonias y sectores de Altamira, beneficiando con ello a poco más de 30 mil habitantes.
Destacó la importancia de la realización de esas jornadas y la activa participación de los Comités de Salud con la finalidad de mantener al municipio de Altamira libre de padecimientos transmitidos por vector, por lo que exhortó a la población en general a conservar los patios y azoteas de sus casas limpios y sin muebles, neumáticos y demás recipientes viejos donde pueda acumularse el agua.
“Es un trabajo que realizamos en equipo con la Jurisdicción Sanitaria Número 12 donde todos unidos trabajando combatimos al dengue y demás enfermedades. Es una cantidad importante de toneladas la que se ha recolectado de cacharros y llantas en estas jornadas, pero lo más destacable es que no se ha dejado de trabajar ni un solo día con estas acciones de descacharrización, abatización y fumigación’’, expresó.
Con maquinaria, equipo y unidades de Servicios Públicos, se retiran llantas, muebles, cubetas, envases y objetos en desuso almacenados en los domicilios, así como en la vía pública, áreas verdes e inmuebles abandonados, complementándose posteriormente estas labores con tareas de fumigación y la aplicación de abate, protegiendo así la salud de toda la comunidad.