La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, conocida como EPOC, conduce de manera progresiva a la muerte por no ser diagnosticada, atendida y tratada de manera oportuna.
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Es más que solo tos y falta de aliento, se pueden desarrollar cuadros del tipo bronquitis crónica o enfisema, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En el año de 2002, la OMS instituyó el Día Mundial de la EPOC el 19 de noviembre, con la finalidad de reducir la tasa de mortalidad que ha tenido un acelerado crecimiento en los últimos años y que cobra gran relevancia este año, al ser esta enfermedad una de las consideradas de mayor riesgo de contraer el virus pandémico SARS-CoV-2.
FUMADORES EN ALTO RIESGO
La enfermedad causa dolencias del tipo pulmonar que limitan el flujo de aire, señala la OMS, siendo los fumadores, mujeres que cocinan con leña o hasta personas que utilizan combustible para calefacción, los que tienen el mayor riesgo de desarrollar el padecimiento.
“No a todos los fumadores les va a dar, pero fumar es uno de los factores de riesgo, hablamos de que con media cajetilla (de tabaco) al día, comenzará haber problemas, puede darse en adolescentes fumadores que hayan nacido con un problema (que afecte al pulmón), pero será el adolescente fumador el que lo pague después”, explicó el doctor Jorge Rosendo Sánchez Medina, presidente nacional, del Colegio Mexicano de Medicina Crítica.
Son hombres mayores de 50 años de edad, quienes mayormente presentan el padecimiento, que de acuerdo a la OMS también se puede desencadenar por la contaminación del aire exterior con productos químicos, en una menor incidencia.
En México representa un grave problema, ya que los jóvenes comienzan a fumar a los 15 años de edad consumiendo hasta seis cigarrillos diariamente, 73% de la población llega a probar cigarros saborizados y 1.5% ha experimentado con el cigarrillo electrónico, aun cuando su venta y consumo está prohibido.
Entre la población adulta se considera que hasta 18% a nivel nacional tiene una adicción al tabaco con la ingesta de hasta 8 cigarrillos diariamente, de acuerdo a los datos que revela la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2018-2019.
En Tamaulipas 3.4% de niños y jóvenes entre 10 a 19 años de edad fuman, es decir, 21 mil 340 aproximadamente, y 12% de la población adulta, lo que se traduce en una estimación de 230 mil 141 personas. Es importante señalar que en este último tenor se supera la media nacional que es de 10%, lo que pone en alerta a las autoridades sobre la importancia de reducir esta adicción.
Sánchez Medina explica que los casos se pueden duplicar y hasta triplicar, si se contabilizaran también los llamados fumadores pasivos, que son todos aquellos que conviven con el fumador, quienes en un rango de 1 al 10, representan hasta 25 de riesgo de desarrollar la EPOC.
“También están en riesgo los pasivos, hay casos identificados, no es lo común, pero se da, no sé por qué la gente fuma y por qué conviven con alguien que fume, aunque no hay casos de niños documentados, un menor con un padre fumador puede que se afecta durante la infancia y le puede dar después”.
SIN CURA, NI TRASPLANTES Y ADIÓS CIGARRO
Una vez que la persona es diagnosticada con EPOC se debe definir el tipo, existen dos variantes de la enfermedad: el enfisema y bronquitis. Las diferencias se pueden notar en el aspecto físico del paciente, en la primera puede tener kilos de más y en la segunda kilos de menos.
En el caso de enfisema la persona atrapa constantemente aire que no sale, lo que genera que el tórax se haga cilíndrico; y en la bronquitis se tienen episodios tipo asma por una constante falta de oxígeno que lleva al cuerpo a una coloración azul (cianosis) de la piel, de uñas, labios y alrededor de los ojos.
Sánchez Medina dijo que, si bien el paciente puede tener una vida larga después de esta enfermedad, no vive con calidad, ya que tiene episodios constantes de falta de aire, tan solo para subir o bajar escaleras o para realizar actividades ordinarias que conlleven un esfuerzo, porque una vez con daño en el pulmón no existe tratamiento que lo revierta.
De acuerdo con el especialista, el tratamiento inicia dejando de fumar, seguido de ejercicios respiratorios y rehabilitación respiratoria, estar alerta de cualquier infección que dañe más los pulmones, ya que una vez con EPOC se está más predispuesto a contagiarse.
A diferencia de otros países, en México este tipo de paciente no es candidato a trasplante de pulmón, en primera porque esto no hará que la enfermedad se cure y en segunda, porque existe una baja donación de órganos.
“No son candidatos a trasplante, aunque se puede hacer un trasplante pulmonar, en otros países sí es un tratamiento adecuado, pero, también genera problemas, el paciente debe de tomar inmunosupresores, también se infecta fácilmente, no es tan fácil vivir con el trasplante pulmonar” enfatiza el también presidente del Colegio de Médicos de Tamaulipas.
En cuanto a los pacientes de EPOC con coronavirus, “ya tiene un pulmón dañado y es agregar otra afectación, el principal problema del EPOC es que el paciente fácilmente se infecta, porque las defensas mecánicas del pulmón se van infectando y eso lo hace susceptible a morir de una neumonía, de eso muere porque el pulmón está tan afectado que una neumonía que no mata a una persona de manera normal, al paciente con EPOC sí”, dijo Sánchez Medina.
De acuerdo con la OMS, para el año de 2030 se habrá convertido en la cuarta causante de muerte, aunque por edad, ya es la tercera en adultos mayores, lo que además viene a incrementar el SARS-CoV-2, del que son altamente vulnerables.