Como si se tratara de una fiesta, charola en mano, vestidos con pantalón negro, camisa blanca, moño y zapatos lustrados un grupo de meseros independientes tomaron las calles para vender agua y refrescos fríos a los automovilistas, esto al quedarse sin empleo por la cancelación indefinida de eventos sociales por la contingencia del Covid-19.
Sin importarles el intenso calor y los inclementes rayos del sol, los desempleados buscan llevar el sustento a casa, ya que la crisis pandémica los ha impactado severamente al engrosar las estadísticas de desempleados.
José Francisco Gutiérrez Reyna, Antonio de León y Juan Jesús Rodríguez, con antigüedad en el oficio de mesero de hasta 30 años se instalaron en el cruce de las calles México y la Avenida Hidalgo para venderles bebidas refrescantes a quienes transitan por esta arteria, además a quien les hacían una compra les regalan un poco de gel antibacterial para agradecer el gesto.
Los empleados eventuales informaron que llevan más de un mes sin trabajo, debido a que se han cancelado todos los festejos y era de donde sostenían a la familia.
"No contamos con un salario fijo y no tenemos para llevarles de comer a nuestros hijos, hay que pagar el agua, la luz, el gas, no podemos quedarnos en casa esperando a que llegue el dinero" aseguró el mesero y parrillero José Francisco Gutiérrez, quién comentó que de lunes a viernes de 12 del medio día a las 4 de la tarde se ponen a vender en la intersección.
Los prestadores de Servicios pidieron a la ciudadanía el apoyo solidario para que si los ven "nos hagan el día comprando el producto, nos ganamos la vida de manera honrada y lo que queremos es llevar el sustento a la familia".
Ellos, como otros meseros en las mismas condiciones, han buscado algún otro oficio para sacar recursos, "pero la gente tan fácil te contrata por temor al coronavirus".
Ante el panorama que se avecina por la pandemia, pidieron el respaldo de las autoridades, para poder superar la crisis que enfrentan.