Los ritos devocionales a la Virgen de Guadalupe, que comienzan con rosarios desde la siguiente semana, se harán con muchas limitaciones para evitar la transmisión del Covid-19, descartándose misas presenciales y grandes tumultos el próximo 12 de diciembre en las parroquias de la Diócesis de Tampico.
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La fiesta religiosa, de las más grandes de la Iglesia católica, se ajustará a las fases marcadas por el semáforo epidemiológico. En el caso de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, conocida como el "Santuario de Guadalupe", del sector El Golfo, que este año cumplirá 96 años, únicamente habrá permisos para peregrinaciones y mañanitas con grupos reducidos, así como el paso rápido de niños ataviados como María y Juan Diego.
El padre Artemio Garza García dio a conocer que la emergencia sanitaria que vivimos por el Covid-19 ha trastocado seriamente las festividades religiosas, y la de la Virgen de Guadalupe, que tradicionalmente tiene lugar los días 11 y 12 de diciembre, será modificada para impedir aglomeraciones y rebrotes de la enfermedad.
“Habrá homilías televisadas y difundidas por redes sociales, mañanitas con algunos músicos y peregrinaciones pequeñas, además de proteger la presencia de los devotos al templo, el cual solo permite un aforo de 100 personas, con protocolos de sanitización”, finalizó.