A 130 años de la llegada del primer tren al sur de Tamaulipas los trabajos ferroviarios han dejado bases sólidas en el desarrollo a esta zona y del país, con el traslado primeramente de pasaje y posteriormente de todo tipo de carga.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
Pero pese a la importancia de este sector y a la cada vez más reclamada incursión de las mujeres en actividades relacionadas con los rieleros y la operación de trenes, el oficio sigue siendo dominado por los varones y el sector femenino no ha encontrado amplia cabida.
El pretexto inicial era que para el manejo de las primeras maquinarias se necesitaba fuerza al ser manuales, pero con la incursión de la tecnología basta oprimir un botón para desarrollar una acción, pero ni con eso se ha abierto la posibilidad a ferrocarrileras.
El 17 de abril de 1890 se tuvo el arribo del primer tren de Ferrocarril Central Mexicano al puerto de Tampico, procedente de San Luis Potosí, iniciando así esta nueva época hacia la modernidad de la zona con la conexión de otras entidades y desde entonces la incursión de las mujeres en estos trabajos han sido contadas.
El proyecto para el arribo femenino a los trabajos ferroviarios se diluyó con la llegada de la pandemia y con el fallecimiento de quien fuera el secretario general de la Sección 6 del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM) en Ciudad Madero, Efraín Córdova Rodríguez, quien impulsaba la iniciativa.
En diciembre de 2019 quien fuera el líder de los trabajadores ferrocarrileros señalaba que para este 2020 se tendría la incursión a la planta productiva del sexo femenino para la operaciones de las máquinas de acero, sin embargo el proyecto se congeló con la llegada del coronavirus y posteriormente con su deceso a causa de este mortal virus.
Rodolfo Torres Sánchez, secretario de Previsión Social del Sindicato Ferrocarrilero, señaló que en el tiempo que lleva en este oficio únicamente ha conocido a una mujer que ha trabajado en el área operativa.
Esta ferrocarrilera forma parye de una dinastía de excelentes trabajadores rieleros en la zona, “es la hija de un compañero maquinista de patio, muy preparada y con mucha experiencia, su papá fue maquinista de caminos también”, expresó.
Actualmente dentro de los trabajos ferroviarios no hay mujeres, únicamente hay personal femenino pero de empresas externas quienes laboran en otras áreas, principalmente administrativas, sin embargo son tratadas como si fueran parte del STFRM. “Es un trabajo muy peligroso, sobre todo los rieleros, los trenistas; en los de oficina era cuestión de apegarse a las reglas y ahí no había peligro, pero el trenista, el reparador de vías, el tallerista, el protector de locomotoras quien es el que lava las máquinas, limpia los tableros, abastece de agua a la máquina, de diésel, de aceite, checa todo el sistema de la máquina, es una labor complicada”, señaló.
Torres Sánchez mencionó que hay algunas mujeres que se desempeñan en otras áreas al ser familiares de ferrocarrileros, podrían ser ellas quienes en un futuro ingresen de lleno en estos trabajos.
HOY ES EL DÍA DEL FERROCARRILERO
En 1944 el presidente de México, Manuel Ávila Camacho, decretó oficialmente que cada 7 de noviembre se conmemore en nuestro país el Día del Ferrocarrilero, para honrar a todos los trabajadores del sector por su labor de servicio diario. Dicho festejo tiene como trasfondo una trágica historia que hoy es conocida como la del “Héroe de Nacozari”, en honor a un maquinista de 26 años que espontáneamente ofrendó su vida un 7 de noviembre de 1907, al sacar valientemente del pueblo de Nacozari, Sonora, un tren cargado con dinamita que ya se estaba incendiando, salvando la vida de sus habitantes. El héroe, identificado como Jesús García Corona, se percató que la máquina 501 cargada con dinamita que debía ser transportada a la mina de Pilares comenzaba a incendiarse, por lo que decidió operar el tren para llevarlo lo más lejos del pueblo de Nacozari, muriendo en esta valiente acción, pero con la satisfacción de haber evitado una terrible tragedia.
17 de abril de 1890, arribó el primer tren de Ferrocarril Central Mexicano al puerto de Tampico, procedente de San Luis Potosí
Jesús García Corona Un maquinista de 26 años que ofrendó su vida un 7 de noviembre de 1907, al sacar del pueblo de Nacozari, Sonora un tren cargado con dinamita que ya se estaba incendiando, evitando así una tragedia mayor
CITA GRANDE
“Es un trabajo muy peligroso sobre todo los rieleros, los trenistas, es muy peligroso, los de oficina era cuestión de apegarse a las reglas y ahí no había peligro, pero el trenista, el reparador de vias, el tallerista, el profesor de locomotoras quien es el que lava las máquinas, limpia los tableros, abastece de agua a la máquina, de diesel de aceite checa todo el sistema de la máquina, es una labor complicada”.