Las cámaras de Comercio de la frontera de Tamaulipas alertaron sobre el acrecentamiento del problema de inseguridad, salud y desempleo que empeorarán los migrantes centroamericanos que transitan en caravana desde Honduras, al quedar como poblaciones flotantes Reynosa, Matamoros o Nuevo Laredo, si no llegan a Estados Unidos.
Christian Pérez, vicepresidente de la Federación Estatal de Cámaras de Comercio exigió que ante ese panorama el gobierno federal “frene” el ingreso a México de desplazados hondureños, ya que de llegar a la frontera norte de México, difícilmente podrán cruzar hacia Estados Unidos.
"Los empresarios de la frontera norte de México hacemos un llamado al Gobierno Federal para que blinde y prohíba el ingreso ilegal de centroamericanos, en especial los miles que provienen en este momento de Honduras en la llamada Caravana del Migrante, con la firme intención de cruzar territorio nacional hacia la región norteamericana", demandó.
El gobierno de Donald Trump ha sido tajante, en el sentido de defender sus fronteras, enviando mensaje de las nulas posibilidades de entrar a esta nación y de lograr su cometido de llegar a la frontera, el problema será para las ciudades y estados fronterizos mexicanos, por donde los centroamericanos pretendan ingresar.
El representante de la Fecanaco pidió el cierre de la frontera sur como una medida de seguridad nacional que puede traer consecuencias a la Divisoria Norte, ya que el destino natural de estas personas que huyen de su país, ante el riesgo de aumentar los problemas sociales, de salud e inseguridad en las ciudades a donde llegan y que ya se viven en las ciudades tamaulipecas.
Advirtió el riesgo de violentar las ciudades fronterizas con la Unión Americana, el surgimiento de pandillas centroamericanas y un recrudecimiento en delitos si las autoridades permiten el ingreso masivo de centroamericanos que huyen de su país y al cual nunca regresarán, con muy altas posibilidades de asentarse definitivamente en la región limítrofe, con toda la problemática que ello implica para los gobiernos de los tres órdenes.
Durante los últimos meses los empresarios hemos percibido un aumento en la cantidad de centroamericanos que se asientan en nuestra ciudad con la intención de cruzar sin éxito, por lo que la política de ingreso de extranjeros a México y sus medidas de protección en la frontera deben cambiar ante el cambio en el entorno económico de los países de origen, indicó.