Vestido con uniforme militar y escoltado por personal de infantería, esta mañana Jorge pasó lista a la tropa, hizo los honores a la bandera mexicana, conoció a Niko y Kis, los binomios canófilos, se comunicó por radio con la base militar del campo número 8 y recibió la instrucción de rescate.
Con la emoción que da ver realizado un sueño, el menor de 12 años, que padece de distrofia muscular, vivió la experiencia de ser “Soldado por un Día”, programa que realiza la Sedena, donde personal de la Secretaría de la Defensa Nacional otorga un recorrido por las instalaciones que ocupa el Quinceavo Batallón de Infantería, como si fuera un alto mando.
Desde su llegada Jorge Emiliano fue recibido con una atención especial, conduciéndolo a los vestidores para que portara su uniforme, después las compañías le rindieron el parte de novedades en la explanada del campo, donde encabezó los honores al Lábaro Patrio con un protrocolo especial.
El recorrido inició con un paseo en un vehículo militar y apreciar a la escuadra canina en acción, ahí pudo conocer cómo es que los perros apoyan en labores de búsqueda y detección de enervantes, más tarde el Soldado Jorge se presentó ante al equipo médico, quienes les explicaron qué hacer en caso de un accidente.
Le enseñaron el equipo de telecomunicación donde el joven pidió el reporte de novedades vía radio a la base del Batallón, mientras aprendía cómo son los diferentes medios por los cuales el Ejército logra la interacción con sus distintas unidades a distancia para intercambiar datos.
“Estoy muy feliz, porque era uno de mis sueños, me gustó mucho poder conocer todo lo que hacen los soldados y les doy las gracias a todos por estos momentos, me gusta mucho todo lo que hacen”, dijo visiblemente emocionado Jorge.
Jorge Emiliano Hernández Salazar acude al Centro de Rehabilitación Teletón en Altamira y fue acompañado por su madre Esmeralda al campo, quien señaló que ellos recibieron la invitación del CRIT, “porque su sueño siempre ha sido ser soldado y esta oportunidad que nos dan es muy grande, estamos muy agradecidos con Dios, la Sedena, y el CRIT”.
La familia Hernández Salazar vive en el fraccionamiento San Jacinto al sur de Altamira, Jorge acude al Centro de Atención Múltiple que se ubica en ese conjunto habitacional y este día olvidó por un momento todo para ser el mejor y más valiente de los militares, sentirse “Soldado por un Día”.
