Más allá de las lentejuelas y el maquillaje con el que se les ha estereotipado, mujeres y hombres trans enfrentan una lucha para desaparecer la discriminación y dar paso a una vida digna que les permita existir con salud, empleo y respeto.
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Hace apenas 12 años que este Día Internacional de la Visibilidad Transgénero fue reconocido oficialmente y aunque el tema, por cuestión cultural, puede llegar a ser polémico y de burla, se trata simplemente de que las personas obtengan los derechos que como seres humanos les corresponden, independiente a su imagen.
Alejandra Lorenzo, primera mujer transgénero que logró en octubre del año pasado obtener su título como Licenciada en Psicología de la UAT en el campus Tampico, destacó que encontrar trabajo ha sido el obstáculo más grande en este camino.
Explicó que desde el 2018 que egresó de la universidad ha tocado puertas buscando empleo, sin que hasta el momento haya sido aceptada e incluso hubo una empresa que la rechazó al escuchar que su voz no sonaba tan femenina como su nombre.
“No se nos brinda la oportunidad por ser una persona trans, me ha tocado, no me lo han dicho directamente. Nos ven como una mala presentación que no puede beneficiar al lugar. A mí no se me ha dado esa oportunidad, es el área donde más he enfrentado discriminación y poca visibilidad”, relató.
Apuntó que, de acuerdo con datos del Inegi, las personas trans son un sector cuya vulnerabilidad es de hasta 72%, por lo que es prioritario desarrollar talleres de sensibilización para el gobierno, las empresas y escuelas.
“Por desconocimiento, por ignorancia no se tiene, no se cuenta con el tacto a las personas como debe ser, que se utilicen los pronombres correctos, que si llega una mujer u hombre trans se le hable por el nombre con el que se sienten identificados”, enfatizó.
TERAPIAS HORMONALES AUTOMEDICADAS GENERAN ESTRAGOS
La necesidad de transformar su cuerpo en la persona que realmente son y la falta de una atención médica profesional tiene con problemas de salud a adultos mayores que se inyectaron sustancias prohibidas y a jóvenes que llevan una terapia hormonal inadecuada.
“Son como unas 35 mujeres de edad mayor y población joven unos 68 personas que ya tienen problemas renales y todo eso por las sustancias que se pusieron en su cuerpo; es una situación crítica y grave lo que está pasando con las poblaciones trans”, reveló la presidenta de la asociación Tamaulipas Diversidad Vhida-trans, Ana Karen López Quintana.
Destacó que en el caso de los jóvenes trans, la expectativa de vida disminuye apenas a 35 años de edad.
“Hay muchas personas adultas mayores que tienen secuelas de todo lo que se pusieron en su cuerpo pero están en situaciones críticas así como población joven está poniéndose terapias hormonales sin una supervisión médica, se automedican”, apuntó.
La activista urgió a las autoridades brindar una cobertura de salud digna y sin discriminación para las personas trans.
“Tamaulipas es un estado conservador en el que los derechos de las personas trans son violentados, en cuestión salud tuvimos cuatro casos de mujeres trans que fueron discriminadas en el Canseco, donde no se les dio un seguimiento”, destacó.
Explicó que a través de los organismos civiles se busca inculcar a las personas trans la cultura de la queja y denuncia con la intención de visibilizar la problemática y obligar a que las autoridades respondan. “Que nos vean como personas, como personas y seres humanos sujetas a derecho. En Tamaulipas hay aproximadamente unas 800 personas trans. Nos falta muchísimo por trabajar”, recalcó.
TRANS RECONOCIMIENTO
Víctor, hombre trans de 39 años, señala que conseguir la aceptación de la familia en el proceso de transformación es una de las partes más complicadas por la cultura que se vive en México.
“Lo más difícil ha sido y sigue siendo la cuestión familiar, desde los 5 años tengo memoria de que yo quería ser de cierta forma y no me dejaban ser, incluso tengo más recuerdos de que todavía no empezaba a hablar y no quería usar más vestidos”, expresó el paramédico que inició su proceso hace 7 años. Reconoció que es posible que el camino sea más fácil para el hombre trans que para las mujeres.
“En México, el ciudadano de primera clase es el hombre, de segunda clase es la mujer; la gente común lo ve así , con las chicas trans ‘si es un hombre ¿por qué va querer ser un ciudadano de segunda clase? Es como si se denigrara”, describió.
“En cambio con nosotros los chicos trans, piensan que son ciudadanos de segunda clase -por nacer mujeres- al ser hombres piensan que queremos mejorar; no me gusta usar esos términos, pero no hay que cerrarnos a la realidad, así nos vemos”, añadió.
Además del estigma, las personas trans tienen que enfrentar un proceso muy complejo para obtener su nueva identificación legal.
“Cuando estaba haciendo el trámite estaba al borde del llanto, entre feliz y una sensación de melancolía, fueron más de 35 años identificándome como otra persona pero es liberador, el hecho de tener el INE con los datos correctos ya no se te quedan viendo tan feo”, recordó.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE LA COMUNIDAD LGTBIQ+?
Actualmente hablar de la comunidad LGTBIQ+ -Lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, transgénero, intersexuales, queers, y el signo de + que incluye a los que no están representados- es tomado como un chiste por todas sus letras, sin embargo, para la psicóloga Alejandra Lorenzo es indispensable identificarse ante esta sociedad. “No es tanto dar a conocer el que sea trans o no, que sea blanca o sea morena, el hecho de que exista la etiqueta abre muchas oportunidad para otras personas que tengan la misma identificación y vean que sí es posible obtener logros”, resaltó.
Celebró que en este proceso electoral algunas personas trans se han animado a participar.
“Las etiquetas son importantes para visibilizar que las personas trans pueden ser alcaldesas, presidentes, académicos, no nada más de estilista que no tiene nada de malo serlo, pero estamos estereotipados. Que se abran las puertas”, finalizó.