Pueblo Viejo, Ver., abril 11.- En riesgo el abasto de agua para la población de los municipios de la zona norte de Veracruz, debido al notable descenso en el nivel de los pozos ocasionado por la ausencia de lluvias, además del peligro que estos se tornen salobres, convirtiendo el agua no apta para el consumo humano, de los animales y los cultivos.

Este problema es recurrente cada año, cuando se intensifica el estiaje, lo que afecta los mantos freáticos que también pierden su nivel, dejan de producir agua dulce, por que el río Pánuco también ha disminuido su caudal, lo que permite el ingreso de agua salada río arriba y esto es lo que torna salobre el agua de los pozos, “se pone gorda”, dijo Javier Méndez González, productor ganadero en el ejido El Barco.

Hasta el momento el agua de los pozos aún se puede utilizar para el hogar y los trabajos del campo, ya sea para dar de beber al ganado y para el riego de los cultivos, pero los niveles cada vez están más bajos, al grado que ya no se podrá sacar agua o se torna salada e inservible, explicó.

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Por su parte, el presidente de la Vieja Guardia Agrarista de Pueblo Viejo, León Almazán Zavala, dijo que la situación de los pozos está tomando tintes críticos, por que las lluvias no llegan, los niveles de los mismos están bajando y pronto se tornará salobre, dejando sin opciones para el abasto de agua a la población.

Recordó que el ingreso de la marea río arriba durante la presente temporada de sequía, se debe al descenso en el volumen de agua que arrastra el río Pánuco hacía el Golfo de México, por lo que el mar lleva el agua salada que invade los mantos freáticos y de ahí alcanza los pozos tornándolos inservibles.

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Situación similar se presenta en los municipios de Tampico Alto y Ozuluama, donde el agua también escasea por efecto del estiaje y en algunas zonas cercanas al mar, el agua tiende a salarse poniendo en aprietos a sus habitantes, ya que es la única forma por medio la cual ellos obtienen el vital líquido para sus actividades domésticas y productivas.