El claxon de coches, rechinido de llantas, bocinas promocionando un producto, perifoneo de servicios o en estas semanas de campañas de candidatos nos someten a niveles de decibeles que rompen no solo nuestra tranquilidad, sino también nuestra salud.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
El crecimiento urbano y comercial que se ha generado en el sur de Tamaulipas y norte de Veracruz ha traído algunos problemas como la contaminación auditiva de empresas y espacios comerciales que operan sin supervisión.
Aunado a ello el incremento del parque vehicular y el exacerbado uso de audífonos para escuchar música desde aparatos móviles se convierten en un verdadero coctel que favorece tanto el estrés como daños irreversibles en oídos.
Por ello, en este Día Internacional de Concienciación sobre el Ruido es importante hacer un recorrido por las causas y daños que este genera en la población.
COMERCIO E INDUSTRIAS
Mientras que en Tampico y su zona metropolitana el desarrollo comercial y urbano genera este tipo de contaminación, en el norte veracruzano el problema se concentra en las grandes compañías que operan con maquinaria pesada las 24 horas los 7 días de la semana.
Para generar conciencia ante al impacto negativo que el sonido descontrolado puede generar en las personas, se ha nombrado hoy como el Día Internacional de Concienciación Sobre el Ruido y de igual manera la Organización Mundial de la Salud fijó el 12 de junio como Día Mundial de la Descontaminación Acústica.
La Organización para la Cooperación Económica advirtió que la contaminación acústica propicia daños fisiológicos y psicosomáticos muchas veces irreversibles a más de 120 millones de personas en el mundo y a 13 millones en los países miembros de ese organismo, entre los que sobresale México, por exposición a sonoridades superiores a 65 decibeles (dB).
Al respecto el director de Protección Civil en Pánuco, Carlos Canales Sánchez, señaló que las empresas, reguladas por dependencias federales, deben ser sujetas a revisión con base a la cantidad de ruido que producen en sus procesos productivos.
“Las que más cuentan con trabajadores diarios en estas condiciones son el Ingenio Azucarero y la compañía Minera Autlán, ambas con cientos de personas diariamente en tres turnos y cuyas condiciones de ruido deben ser monitoreadas”, apuntó el entrevistado.
La afectación a la mancha urbana por estas factorías es baja, ya que se encuentran en zonas alejadas de áreas habitadas, pero son los trabajadores los que ven mermada su capacidad auditiva por estas condiciones.
Hacia el norte, en Tampico, Madero y Altamira es concretamente el ruido de los autos, aterrizaje y despegue de aviones, así como la propaganda por altoparlantes, lo que genera una mayor cantidad de ruido.
“La Organización Mundial de la Salud asegura que el oído humano puede soportar un total aproximado a 55 decibelios sin daño a la salud, aunque esto también depende del tipo de exposición al referido ruido”, explicó.
CONECTADOS AL RUIDO
Aunque parezcan inofensivos, los audífonos convencionales o los AirPods se han convertido en factores de daño a la audición de la población.
Son principalmente los jóvenes quienes cada vez emplean más estos dispositivos en gimnasios, el transporte público, trabajando e incluso realizando tareas en el hogar, sin considerar que la exposición excesiva a estos contribuye a sufrir afecciones en oídos, cardíacas, dificultades en el aprendizaje, alteraciones en el sueño e incluso depresión.
Expertos recomiendan el uso de auriculares de inducción, los que permiten que el sonido sea transmitido por vibración a través de los huesos del cráneo hasta llegar al oído interno, sin que sean colocados en el canal auditivo y el tímpano.
“Una hora escuchando sonidos muy altos puede generar problemas en la salud, además del daño que se provocan todas aquellas personas que utilizan audífonos por un largo tiempo”, agregó el consultado.
AMBIENTALISTAS PIDEN LEGISLAR SOBRE USO DE PIROTECNIA
Debido a que cada vez es más fácil y común utilizar la pirotecnia durante festejos en cualquier fecha del año pese a los daños auditivos que puede generar, ambientalistas piden que se legisle sobre este tipo de contaminación.
“No hay una normatividad, pensar en quién o cómo se regula la contaminación auditiva por cohetes es muy importante, tal vez debería de prohibirse”, declaró a El Sol de Tampico, Miguel Ángel Verástegui, presidente de la Asociación Mediadora para el Bienestar Inteligente, Ecológico y Normado de Tampico Altamira y Madero (Ambientam).
Explicó que este tema debe ser regulado con precisión, ya que el sonido que producen causa afectaciones en la población.
“Habría que hacer una legislación, afecta a las personas, a los bebés, a los animales; no es algo que se le vea como un beneficio, muchos lo ven como estar quemando dinero, y peligroso”, destacó.
Agregó que las autoridades deben contemplar el impacto que genera la explosión de cohetones.
“Es un ruido constante, hay normatividad para fraccionamientos, casas habitación, comercios e industrias, hasta fiestas con cierta permisibilidad se rigen por 55 o 65 decibeles, pero eso no ocurre con los cohetes”, destacó.