La sequía terminó verdadero furor generó el día de ayer la venta de un lote de cervezas en una tienda de autoservicio, donde decenas de personas hicieron largas filas para adquirir el producto que les fue vendido de manera racionada.
Desde el mediodía comenzaron a llegar los compradores al establecimiento de Walmart ubicado en bulevar Adolfo López Mateos y avenida Ejército Mexicano para comprar la amarga bebida que desde hace varias semanas registra desabasto en la zona por el freno en la producción a consecuencia de la pandemia de coronavirus.
En punto de las 15:00 horas salió el personal de la tienda con el producto, mismo que comenzó a venderse, limitado a dos paquetes por persona, uno en presentación de doce latas a un costo de 172 pesos y otro de doce botellas de cuarto en 120 pesos.
El director del Centro de Integración Juvenil (CIJ), Jorge Ávalos Castelán, apenas ayer advertía sobre adicciones “espontáneas” al consumo de bebidas alcohólicas, tabaco o comida chatarra a consecuencia del estrés generado por el confinamiento que vivimos desde el 16 de marzo, justo hace dos meses.
La inusitada reacción que se tuvo por una parte de la población ante la reactivación de venta de cerveza al público, alertó a las autoridades de salud mental en la zona, al considerar que esta conducta es parte de las posibles repercusiones de la ansiedad que se deriva del confinamiento social que se vive ante la incertidumbre por la pandemia del Covid-19.
Y es que la mañana de este viernes, después que se publicitara que se estaría vendiendo cerveza, diversas tiendas de autoservicio, como Walmart sucursal Ejército Mexicano, se vieron prácticamente abarrotadas por los compradores que hicieron largas filas por horas, para adquirir la bebida embriagante, luego que por más de un mes se suspendiera la comercialización de estos productos.
"Por un lado es el confinamiento y otro que las personas no estaban muy acostumbradas a la convivencia continua, a pesar de que están con gente conocida o con su familia, llega un momento en que se vuelve tensionante las relaciones y una forma de poder liberar es consumiendo alcohol u otra sustancia, tanto adultos como jóvenes".
Señaló el director del Centro de Integración Juvenil en Tampico, Jorge Ávalos Castelán, expresó que el resguardo domiciliario incrementa en algunas personas la necesidad de consumo de bebidas alcohólicas, tabaco o comida chatarra, así como medicamentos controlados, derivado de la ansiedad que tienen por la incertidumbre que se vive durante la condición de pandemia.
"Una cuestión de esta contingencia con el Covid 19 es la incertidumbre de que no se sabe a ciencia cierta qué tanta exposición, deterioro de la salud pudiera tener, por otro lado, no tener una fecha, o un tiempo preciso para retomar actividades".
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