Cada semana 2 jóvenes son atendidas por partos en el área de ginecología del hospital general de Altamira, lo que representa un riesgo latente de muerte materno infantil, teniendo ya que reforzar desde el quinto año de primaria las acciones de prevención para evitar los embarazos no deseados en las menores de edad.
José Manuel Sierra Castillo, director del nosocomio en la urbe industrial, señaló que de todos los casos atendidos, por lo menos 6 menores abortaron en años anteriores, siendo el rango de edad de estas gestaciones prematuras las jovencitas que van desde los 12 hasta los 19 años.
“Deberíamos aplicarnos más en escuelas de nivel primaria y secundaria, sin descuidar los de preparatoria, por ahí ya se tiene un programa de gobierno del estado y la secretaría de Salud para incursionar en esos grados y ofrecer pláticas de quinto y sexto año de primaria”, apuntó el funcionario estatal.
Revela que en Altamira existen niñas de 12 a 14 años susceptibles a embarazos no deseados, comúnmente por falta de la cultura de la prevención y orientación sexual, por lo que es importante que los padres de familia también contribuyan a que esta problemática disminuya.
En lo que va del año 54 adolescentes embarazadas han sido atendidas en el hospital Rodolfo Torre Cantú de Altamira, cifra que para la autoridad representa una estadística elevada que de no atenderse podría dispararse para los siguientes años, originando circunstancias de alto riesgo.