El rezago de más de tres décadas que afrontan el equipamiento hidráulico en la conurbación de Tampico y las inversiones millonarias necesarias para la sustitución y modernización de la red sanitaria, así como para la contención de inundaciones y aprovechamiento sustentable del agua, hace urgente que la Comisión Nacional del Agua devuelva a la región una parte de la recaudación anual y que los gobiernos recurran a fondos nacionales e internacionales.
El expresidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Tamaulipas, Alfonso Celestino Uresti, dijo que la solicitud es que las autoridades ya no desdeñen la problemática que ocasiona el rezago acumulado por decenas de años en la red hidrosanitaria y que pone en riesgo la salud pública, ofreciendo además un aspecto deplorable en zonas como el centro histórico de Tampico, que se promueve turístico.
Incluso, señaló que la Conagua recauda anualmente más de 500 millones de pesos de impuestos a grandes usuarios que extraen agua, como son Comisión Federal de Electricidad, Petróleos Mexicanos y Comapa, y si se usara una parte de ellos podrían reducir las amenazas de escasez de agua que aumentan cada año por el desperdicio, la falta de infraestructura para su explotación racional y equilibrada, así como el riesgo permanente de una gran inundación que asolaría al sur de Tamaulipas.
Si bien, dijo, se necesitan recursos millonarios para reparar o sustituir la red de drenaje, reparar los diques en el sistema lagunario Chairel y de infraestructura para mejorar la calidad del agua, corresponde al gobierno del estado y a los tres municipios hacer equipo para obtener fondos especiales.