Los avances tecnológicos y el estilo de vida de los habitantes de la zona conurbada han facilitado con cada vez mayor recurrencia el uso de dispositivos electrónicos entre los más pequeños del hogar.
Incluso antes de dar sus primeros pasos la mayoría de los niños ya ha estado en contacto no únicamente con la televisión, sino con tabletas y smartphones por periodos prolongados.
Pese a los múltiples beneficios que pudieran enumerarse, como el entretenimiento a bajo costo y la variedad de contenidos educativos a los que pueden acceder a través del Internet, los especialistas describen que lo ideal es esperar hasta los diez o doce años para exponerlos a la luz artificial, ya que sus pupilas no están listas para este tipo de impacto.
“Sin duda la luz de los aparatos electrónicos te va afectando. Ahora hemos visto a niños nacidos en el nuevo milenio a los que su mamá les da una tableta para que se entretengan viendo caricaturas, esto sin pensar que ese contacto con la luz artificial va dañando su vista”, explicó el Dr. Celestino González Muela.
En este sentido, el entrevistado detalló que los casos de debilidad visual derivados precisamente del contacto con ese tipo de iluminación se conocen como problemas o errores de refracción.
Dichos padecimientos son trastornos oculares muy frecuentes en los que el ojo no logra enfocar claramente los objetos, provocando una visión borrosa o nublada.
Hasta hace una década en casi todos los hogares de Tampico, Ciudad Madero y la región se controlaba el uso de la televisión, limitándolo de una a tres horas al día como máximo. Sin embargo, con el auge de los celulares las nuevas generaciones pasan la mayor parte de su tiempo “pegados” a una pantalla.
“Del 2010 para acá ya manejan -los niños- el celular hasta mejor que uno y sus ojitos no están listos para recibir este tipo de iluminación; ya hay campañas evitando que utilicen tanto estos aparatos porque estamos viendo que a temprana edad ya usan lentes”, manifestó el integrante del Sistema DIF en la urbe petrolera.
En este sentido agregó que cada vez es más frecuente escuchar a profesores insistiendo que los alumnos no aprenden y que los tienen que cambiar de mesabanco para que alcancen a ver el pizarrón, “pero esa no es la solución porque a veces para estudiar o leer ya no ven las letras, ya tienen un problema de refracción y necesitan un apoyo para poder aprender”.
LOS MÁS FRECUENTES
Los padecimientos más frecuentes entre los menores de 10 y 12 años son la hipermetropía, el astigmatismo y la miopía, mismos que afortunadamente pueden solucionarse o corregirse con el uso de la graduación indicada en sus anteojos.
González Muela exhortó a los padres de familia a cuidar la salud visual de sus hijos, recordando que de acuerdo con diversos estudios médicos lo ideal es esperar hasta que cumplan los 12 años para otorgarles un dispositivo móvil.
LOS PROBLEMAS DE REFRACCIÓN MAS COMUNES
- Hipermetropía: Afección ocular que provoca que los objetos cercanos se vean borrosos. Quienes lo padecen deben entrecerrar los ojos para ver.
- Astigmatismo: Anomalía que provoca que se vean deformadas las imágenes y poco claro o difuso el contorno de las cosas.
- Miopía: Ocurre cuando la persona tiene dificultades para ver con claridad los objetos distantes.
En los niños, la miopía suele aumentar hasta que dejan de crecer
PRINCIPALES CAUSAS
Según la OMS
- Errores de refracción no corregidos
- Cataratas
- Degeneración macular relacionada con la edad
- Glaucoma
- Retinopatía diabética
- Opacidad de la córnea