La destrucción de la infraestructura hidráulica, tan importante como el dique "El Camalote”, que deja escapar veinte metros cúbicos por segundo de agua dulce y que visibiliza la negligencia oficial, falta de obras y deficiente administración de los embalses, sitúa en un punto crítico el abastecimiento del recurso para los hogares y la industria de la zona metropolitana de Tampico y pone en riesgo producción pesquera.
José Luis León Hurtado, presidente del Consejo Ciudadano del Agua del Estuario del Río Pánuco (Cocaerp), advirtió que especialistas realizaron esta semana un recorrido de inspección por el río Tamesí hasta la esclusa ubicada en el ejido Mata la Monteada, detectando el mal estado del dique “El Camalote”, pues a través de siete cavidades fluye el vital recurso hacia la zona salobre, sin que haya proyecto alguno para revertir el deterioro.
"El desperdicio de esa cantidad de agua, que es de 20 milímetros por segundo, más la extracción de otros 8 metros cúbicos por segundo extraído para el abasto doméstico y uso industrial, aumenta la presión hacia el sistema lagunario, que puede derivar en desabasto", denunció.
Condicionantes como escasas precipitaciones pluviales, altas temperaturas, aumento de la evaporización y mayor uso, se suman a esta amenaza y aceleran la disminución de niveles en los sitios de captación del agua que suministra la Comapa, expuso.
Ante ese riesgo, el especialista ambiental sugirió la conformación de un bloque entre gobierno, empresarios e industriales para buscar acciones y soluciones consensuadas, elaborar y aprobar un Plan Hidráulico de Administración del Agua, generador de proyectos técnicos y financieros para resolver esa amenaza que se yergue sobre la región.
Expresó que el mayor capital de recursos hidráulicos de Tamaulipas se encuentra en el sur del estado, constituidos por los escurrimientos del río Guayalejo, Tamesí y el Sistema Lagunario del río Tamesí con 42,750 hectáreas de superficie compartida a medias con el norte de Veracruz.
"Esta zona posee un embalse de agua dulce creado a partir de los años 50 a través de siete diques vertedores que separan las aguas dulces de las salobres del Estuario del Río Pánuco y que desde entonces soporta la creciente demanda de zona conurbada de Tampico-Madero-Altamir, suministrando así 7 u 8 metros cúbicos por segundo requerido para uso doméstico e industrial.