El miedo propagado por el coronavirus, que ha disminuido sustancialmente la afluencia de comensales a restaurantes de esta localidad, favorece la entrega de comida a domicilio y empleados dedicados al reparto a través de aplicaciones como Yo Soy Juan y Uber Eats, entre otras, reportan incremento en la demanda de servicios.
En motos, bicicletas y automóviles, los repartidores no solo llevan a casa o la oficina tacos, tortas, pizzas, pollo frito, sino también cortes de carne y comida sana, aunque estiman que una vez que avance la enfermedad, podría darse mayor florecimiento del negocio informó Nelson Avendaño Cobos director de Yo Soy Juan.
Actualmente el incremento es del 30%, desde el pasado fin de semana, porque fue quincena y hubo "puente vacacional", pero esperaremos como avanza la contingencia sanitaria, agregó, y es probable que este sector alcance un repunte importante, ante la recomendación de evitar lugares concurridos.
Dijo que en esta localidad existen solo algunas empresas oficialmente dedicados al reparto de comida a domicilio, pero existen otras 30 que laboran en la informalidad, las cuales emplean a más de 300 personas.