La comunidad de negocios del sur de Tamaulipas insistió en su propuesta que el gobierno estatal condone la recaudación del Impuesto Sobre Nóminas durante cinco meses para apoyar el florecimiento de la economía local, propuesta que ha venido siendo rechazada a medio año que comenzó la emergencia de salud.
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María Dolores Martínez Cañez, presidente de la Asociación Regional de Comerciantes e Industriales Mexicanos, consideró que las acciones tomadas del gobierno estatal y federal para paliar la crisis económica por la pandemia son insuficientes y no han detenido la mortandad de empresas.
Hay inacción del gobierno federal y los apoyos del estado hacen muy lenta la reactivación económica y no están a la altura de la emergencia por la que atraviesa el sector productivo de la región y en la entidad, agregó.
Como medidas urgentes, la ARCIM propuso un programa de salvamento al empleo, la instalación de un programa de estímulos de emergencia, entre los que destacó dejar de cobrar el Impuesto Sobre Nóminas para los empleos actuales, todo nuevo empleo que ocurra a partir de octubre.
“Lo que requerimos son incentivos para reactivar la actividad empresarial, condiciones fiscales razonables en el contexto de emergencia que vivimos y la reapertura total de la actividad productiva”.