La discapacidad no es impedimento para el desarrollo de las personas. Existen ejemplos de vida y superación de aquellos que, al llegar a tocar fondo por alguna situación que les cause invalidez, logran salir adelante con perseverancia y dedicación.
Tal es el caso de Raymundo Pecina Díaz de León, regidor No. 10 en Ciudad Madero, quien presenta una discapacidad visual desde los 15 años, situación que no le impidió obtener una licenciatura en psicología y ahora ser parte del cuerpo colegiado de la administración municipal.
Una historia de resiliencia y superación
“Mi situación visual ha sido diferente. Cuando nací, tenía un defecto visual. Mis padres se dieron cuenta de que no veía bien y me atendieron médicamente. El diagnóstico de los médicos es que básicamente se trata de una malformación en la retina”, aseveró.
Durante los primeros 15 años de vida, tenía una visión del 30%, lo cual le impedía realizar actividades como el resto de los adolescentes, lo que lo deprimía demasiado.
“Mi padecimiento es degenerativo. Fui perdiendo la vista poco a poco hasta que a los 14 o 15 años perdí la visión por completo”, indicó.
Durante estos primeros años, con dificultades y el apoyo de sus padres, aprendió a leer y a escribir. “Mi familia siempre estuvo apoyándome. A veces hacían adaptaciones, porque cuando tenemos una discapacidad, sobre todo la visual, hay que hacer adaptaciones en la enseñanza”.
Tres años de depresión tras perder completamente la visión
Al perder completamente la visión, vivió los años más difíciles de su vida, atravesando un duelo acompañado de depresión.
“Cuando pierdes un sentido o lo vas perdiendo, vives ese duelo. En mi caso, quizás duró unos tres años más o menos, hasta que acepté esta situación”, externó el hombre, para quien su familia y amigos fueron fundamentales para poder levantarse y seguir adelante.
“Como personas con discapacidad, los maestros tienen que aplicarse más a fondo en la enseñanza. En ese aspecto, ellos también fueron un motor, una red de apoyo, incluso en la cuestión espiritual dentro de una iglesia”, afirmó.
Una vez superado este episodio de su vida, continuó con sus estudios de secundaria, preparatoria y universidad.
“Tuve que aprender también el uso de la tecnología, como los sistemas parlantes o lectores de pantalla. Básicamente, son los que ayudan a que puedas utilizar un teléfono inteligente o una computadora mediante un sintetizador de voz que te permite escuchar lo que está en la pantalla, ya sea tocando la pantalla en el caso de los celulares”, refirió.
Tuvo dos opciones para estudiar en la universidad: la licenciatura en Ciencias de la Comunicación o la Psicología, inclinándose por esta última profesión.
“Era el momento de pensar qué carrera estudiar para que no se me dificultara tanto por mi condición”, indicó el concejal, quien considera que fue una buena decisión, ya que gracias a esa profesión ha tenido la oportunidad de apoyar a otras personas con alguna discapacidad.
“Es una carrera en la que tengo la responsabilidad y el privilegio de ayudar, y es una de las cosas que siempre me ha impulsado. Ayudar a los demás es una de las cosas que me motiva”, lo que considera una terapia propia.
Además de ser regidor y presidente de la Comisión de Grupos Vulnerables en el ayuntamiento, es profesor de atención complementaria para niños con discapacidad visual en el Centro de Atención Múltiple (CAM) de Ciudad Madero.
La tecnología como aliada
Para Ángel de Jesús Pérez Sánchez, no ha sido fácil superar las etapas de las personas que presentan dificultades visuales, pero asegura que ha encontrado en la tecnología una aliada.
El maestro de la escuela Camino de Luz indicó que los gadgets han simplificado la vida de todas aquellas personas con discapacidad visual.
“Para una persona invidente, la computadora o el celular han desbancado al sistema braille, porque son más prácticos. A lo mejor para mí es más sencillo escribir un texto que tú puedas leer, que escribirlo en braille, porque tal vez tú no sabes leerlo”, señaló.
Incluso, no es necesario contar con programas complicados o caros para que las personas puedan interactuar.
“Realmente no tiene gran ciencia. Solo es que el teléfono se vuelve parlante, entonces todo lo que venga en texto o ciertas imágenes, las puede leer una voz o un lector de pantalla”, dijo.
Esta tecnología ha mejorado la calidad de vida de las personas con estas dificultades.
“Eso nos facilita bastante la vida. Yo puedo escribir un texto con algún asistente, dictar un mensaje, un WhatsApp, un estado de Facebook o un tuit que tú puedas leer. Si lo escribo en braille, los demás no lo entenderían”, aseveró.
Todo este tipo de aprendizaje lo transmite a sus alumnos para que ellos también puedan interactuar más fácilmente con personas que no tengan discapacidad visual.
Más de 100 mil personas con discapacidad en Tamaulipas no cuentan con servicio médico
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en Tamaulipas hay 577,731 personas con alguna discapacidad, lo que representa el 16% de la población.
De estas, 107 mil 115 no están afiliadas a instituciones de salud como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Petróleos Mexicanos (Pemex), la Secretaría de la Defensa Nacional o la Marina.
En Tamaulipas, hay un padrón de 27 mil 087 personas beneficiadas con la Beca para el Bienestar para personas con discapacidad de 30 a 64 años, con una inversión social de 503 mil 818 millones de pesos, señaló el Delegado de Programas Federales en la entidad, Luis Lauro Reyes Rodríguez.
Mientras tanto, a nivel nacional, la pensión atiende a un promedio de un millón 273 mil 423 personas con discapacidad, quienes reciben un apoyo de 3,100 pesos de manera bimestral.
El funcionario federal mencionó que en Tamaulipas están disponibles 41 Módulos de Bienestar para el registro de personas con discapacidad, que brindan atención de lunes a sábado de 10 de la mañana a 4 de la tarde.
Para conocer más sobre la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad y el módulo más cercano a tu localidad, se puede consultar la página oficial de la Secretaría de Bienestar: gob.mx/bienestar
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Los documentos que deberán presentarse son: identificación oficial vigente; CURP de reciente impresión; acta de nacimiento legible; comprobante de domicilio no mayor a seis meses; certificado de discapacidad emitido por alguna institución pública de salud y número de teléfono celular para dar seguimiento al trámite.
