Dentro de los fenómenos meteorológicos actuales, la onda de calor es una que afecta a gran parte de la población y que también tiene efecto en los animales, tanto en las mascotas como en aquellos que se encuentren en la naturaleza como las aves por el peligro de sufrir un golpe de calor.
Los golpes de calor son aquellos en donde el cuerpo ya no tiene la capacidad de regular la temperatura; en el caso de los humanos se presenta con síntomas como la piel seca, calambres, náuseas y la aceleración del pulso.
En los animales termina por afectarles de manera similar, ya que se ven expuestos a los rayos de Sol como al calor de manera directa.
Esto tiene efectos en las aves que van desde que luzcan desorientadas al volar, como que puedan caer del cielo desmayadas o ya muertas ante la grave deshidratación, por lo que hay que saber cómo poder ayudarlas y cómo actuar en caso de que alguna ave caiga cerca de la posición de la persona.
¿Cómo ayudar a las aves ante el calor?
Primero es importante saber las cosas que no deben hacerse cuando se encuentra a un animal desmayado en la calle, ya que, como todo ser vivo, su recuperación implica ciertos procesos y no el solo actuar por actuar.
Si ocurre el caso de encontrar un ave afectada por el calor, no se le debe sumergir en el agua, esto es un error, no funcionará para recuperar su temperatura corporal y solo se complicaría su movilidad o de poder utilizar sus alas.
También, no se le debe meter o colocar de frente a un aire acondicionado, ni tampoco se les debe dar alimento o abrirles el pico con fuerza o podría provocarle mucho daño.
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Respecto a lo que se debe realizar es llevar al ave a la sombra lo más rápido posible, dejar que ya no esté expuesta al calor, como a los rayos del Sol directo.
Lo mejor es colocarlo en una caja de cartón con hoyitos en donde pueda respirar y en donde se encuentre freso.
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Tras unos minutos en la caja, se puede comenzar a rociarle con cuidado un poco de agua que se encuentre a temperatura ambiente con mucho cuidado y cuidando de no empaparlo. El agua es de sus mejores aliados, pero si se usa de manera adecuada para refrescarlos.
Si te encuentras en una casa en donde es posible que exista un nido o donde se puede ver a algunas aves sobrevolar, puedes crear pequeñas fuentes artificiales o puntos de agua para que se refresquen con algunos platos de barro o extendidos y un poco de agua, no mucha para que no se riegue ni para que las aves tengan peligro de ahogarse, solo la suficiente para que pueda refrescar su cuerpo o tomar si lo necesitan.
Información publicada originalmente en EL SOL DE PUEBLA