Los oferentes de los rodantes de Tampico y la región han abandonado sus puestos para comenzar a trabajar como albañiles.
Por lo menos mil personas han dejado de laborar en mercados rodantes en la zona sur de Tamaulipas. Por las bajas ventas que se tienen durante la pandemia, no pudieron recuperar sus inversiones y debieron de cerrar sus puestos para dedicarse a otras actividades, señaló Araceli Bello Olvera, presidenta de la Unión Democrática de Oferentes de los Mercados Sobre Ruedas.
PIDEN CRÉDITOS DE APOYO
Indicó que se tiene una propuesta para que el Gobierno Municipal de Tampico aumente dos pesos el cobro de piso en los rodantes y ese dinero sea utilizado como un fondo para poder financiar diversos créditos a los comerciantes.
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Bello Olvera dijo que debido a las restricciones que se han tenido con la pandemia y a la crisis que se generó, las ventas se desplomaron de forma alarmante en estos centros de abasto móviles.
ABANDONAN MERCADO DEL PARQUE MÉNDEZ
Comentó que hay rodantes como el que se ubica en la calle Tamaulipas, cerca del parque Méndez, el cual tiene 50 años de estarse instalando en ese punto, donde la reducción de oferentes ha sido hasta de un 70% por la falta de ventas.
Mientras que en general los mercados sobre ruedas han resentido una disminución de hasta la mitad de los comerciantes, ante la situación crítica que se vive por la pandemia.
SIN APOYOS EN EL SUR DE TAMAULIPAS
La entrevistada añadió que no han tenido el apoyo de ningún programa por parte del gobierno, a pesar de haber solicitado ya un esquema de créditos blandos para la reestructuración de sus comercios "pues somos parte de la economía de los municipios y del sistema local de mercados, por eso insistimos que se invierta en los rodantes y que se ayude a las familias que trabajan en este tipo de centro de abastos".
Comenta que eran poco más de dos mil personas las que elaboraban dentro de los 50 mercados rodantes que existen en Tampico, Ciudad Madero y la región y actualmente solo quedan alrededor de mil oferentes.
Finalmente, reiteró que muchos de los comerciantes abandonaron sus puestos y ahora trabajan de albañiles.