La re instauración de la materia de civismo en el sistema de educación básica está siendo exigida por maestros como una manera de contrarrestar la mal llamada “modernidad” e impulsar el tejido social así como re valorar el papel del docente como mentor de generaciones.
Para los siguientes meses están programadas discusiones sobre los cambios con motivo de la cancelación de la Reforma Educativa que también incluye la modificación de los libros de texto.
Fidel Mario Tejeda Esquivel, dirigente de la Federación Estatal de Jubilados del ISSSTE e integrante del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, señaló que el papel del maestro ha pasado de mentor ha empleado y en algunos casos, relegado dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje.
Desde hace más de quince años y como parte de las actualizaciones educativas en afán de responder a los nuevos retos, la materia de civismo fue eliminada de salones de clase de primaria y secundaria.
“Los valores se aprenden en casa y se refuerzan en la escuela, pero si no ha existido la combinación de ambos aspectos como ha ocurrido en los últimos años evidentemente nos enfrentamos a un panorama poco alentador”, señaló el dirigente.
Debemos, dijo, volver a lo bueno del pasado, a la experiencia, los valores como la moral, la ética, la honestidad, no pasarán de moda, se les ha dejado de lado pero todavía hay muchas personas que los tenemos vigentes y es necesario, agregó, volver a darles funcionalidad.
“Se habla de modernidad, de libertades y sí, si está bien adaptarse a los tiempos pero no implica desechar lo bueno y pensar que las libertades es una autorización tácita para hacer lo que se venga en gana, los valores son base para construir una mejor familia y sociedad a la vez, la materia de civismo debe volver a impartirse en las escuelas públicas”, citó Tejeda.