Cerrada a los paseantes permanece la playa de Miramar debido a que sigue latente la llegada de residuos de hidrocarburos que pueden afectar a los visitantes, como ya ocurrió con decenas de personas en las últimas horas, que resultaron con manchas en sus extremidades.
La bandera negra se implementó a partir de este día para advertir a los visitantes que el mar no era seguro, debido a que los restos de sustancias tóxicas se encuentran todavía en una amplia zona a pocos metros de la orilla de la playa.
Esta situación se mantendrá por lo menos durante la mañana de este sábado o hasta que autoridades de Petróleos Mexicanos comuniquen que ha sido reparado el ducto que se fracturó y se haya efectuado la limpieza tanto en la zona de bañistas como en aguas de playa.
Desde el miércoles pasado que empezaron a llegar a la zona de Miramar restos de chapapote no se han presentado condiciones de gravedad que puedan originar afectaciones graves a los paseantes, sin embargo se mantiene la alerta para evitar algún percance.