A sus 31 años, la joven Mary Jane como es conocida por los maestros de la pala y la cuchara ha demostrado que el oficio de la albañilería no es solamente para los hombres, sino para todas aquellas personas que quieren salir adelante y cumplir sus sueños.
Melani Esthibaliz Mendoza Acosta platicó a EL SOL DE TAMPICO, que en sus últimos tres años ha compartido hombro con hombro el esfuerzo diario con los trabajadores de la construcción quienes no importando el intenso calor cimientan aquellos inmuebles que albergarán comercios y hogares.
La madre de un menor de 14 años, comentó que se ha tenido que enfrentar en muchas ocasiones al maltrato de quienes son sus compañeros, principalmente al ser un oficio dominado por el llamado sexo fuerte, sin embargo, con el paso de los años que le han brindado experiencia, ha demostrado que ella es un gran elemento.
Dijo que está siendo apoyada por los arquitectos responsables de las constructoras, quienes les dieron las facilidades de aprender como ayudante de albañil, que en la actualidad tiene muy buena relación con los demás maestros de la pala y la cuchara.
La Mary Jane de Tampico, como es conocida por sus compañeros, debido a que esa es su frase para demostrar su descontento o las ganas de superarse, mencionó que entre sus metas está seguir superándose en sus estudios, por lo cual está realizando en el bachillerato, mismo que interrumpió al cumplir los 17 años cuando se embarazó de su hijo.
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“Actualmente me encuentro estudiando, tengo un hijo que va a cumplir 14 años ahora sí, él se ha convertido en mi impulso para continuar con mis estudios después de haberlo suspendido cuando me embarace a los 17 años.
Mi familia de Coatzacoalcos lo cuida desde hace dos años y a quienes les envió parte de mi salario”, expresó.
Reconoció que no llega a ganar mucho dinero, sin embargo no se queja por el simple hecho de estar aplicando lo aprendido en algunas obras realizadas de manera externa.
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Así como las reparaciones a su hogar, que poco a poco busca tener en buenas condiciones para cuando su pequeño se encuentre en sus brazos.
Tiene el sueño de convertirse en veterinaria
“Se que no gano mucho como ayudante de albañil, pero he aprendido a realizar las reparaciones en mi casa, me aviento mis trabajos por fuera, eso ya es una lanita extra y me gusta lo que hago”, indicó.
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Al ser cuestionada sobre cuáles son sus metas a futuro, expresó que desea concluir sus estudios de bachillerato para continuar superándose y tener su propio negocio de veterinaria y sobre todo ser la mejor en el sur de Tamaulipas, “me gustan muchos los animales, tengo cinco perros y ellos son mi fuerte”
Destacó que es “una mujer que si no vienes yo lo hago, busco en Youtube o otras plataformas además de lo aprendido en la obra como es la mezcla, acarreo, bloque y todo aquello que está relacionado con el oficio de albañil”, profesión que le da dado muchas bendiciones a Mary Jane, quien aspira a ser la mejor veterinaria en Tampico.