La avenida más pequeña de Tampico desapareció bajo la nueva urbanización de la ciudad, fue construida sobre lo que fue un brazo del río Tamesí, cuando el puerto iba cumplir sus primeros 100 años de existencia, por eso se llamó Centenario.
SALIÓ DEL RÍO PARA LLEGAR A LA PLAZA
La decisión de secar el río cambió para siempre la fisonomía del área por donde llegaban la mayoría de los visitantes a la ciudad, se empezó en 1918 y una vez que concluyó la desecación, el amplio terreno que fue ganado al afluente de inmediato se cubrió de puestos de comida y otros comercios, así como casas de madera improvisadas.
El proyecto que se tenía era crear ahí una zona pública, al ser el primer punto donde los viajeros arribaban, el cual incluía una avenida que conectara a la plaza de la Libertad y la calle Ribera, una de las arterias más importantes de la ciudad en aquella década de 1920.
Para 1922 el proyecto en el área del relleno del Tamesí, como se le conocía entonces a esta zona contigua al muelle de Tampico, comenzó a tomar forma al acercarse el aniversario de los 100 años de la ciudad y un grupo de entusiastas jóvenes impulsaron la creación de un jardín y el municipio la construcción de una avenida conmemorativa.
ESTUVO LIGADA A LA CONSTRUCCIÓN DE LA PLAZA HIJAS DE TAMPICO
A estos promotores se les conoció como Hijas e Hijos de Tampico, quienes organizaron diversas actividades y eventos para reunir recursos y construir la plaza, las cual no pudo ser terminada a tiempo, pues hasta el mes de julio de 1923 fue cuando pudieron adquirir los terrenos y empezó a rellenarse la zona.
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Se requirieron poco más de 8 mil metros de material, traído del cerro de Andonegui, para poder nivelar esta parte de la ciudad, lo cual se realizó con la ayuda de la Compañía Eléctrica de Luz, Fuerza y Tracción de Tampico, dueña de los tranvías, teniendo que construir un tendido especial desde la plaza de la Libertad para vaciar los materiales.
Una vez hecho esto, se inicio con el trazo de la plaza y de la avenida, que tendría poco más de 200 metros de longitud, la cual se planeó rodeada de jardineras y al final se alzaría un monumento a los fundadores del Puerto, por lo cual asociaciones de obreros participaron en apoyar la construcción de una estela como homenajes a quienes repoblaron la ciudad.
SUFRIÓ VARIAS TRANSFORMACIONES
La avenida atravesaba desde la calle Héroe de Nacozari hasta la plaza de la Libertad, por en medio del edificio de “La Luz”, hoy de la Secretaría de Hacienda, y el Hotel Sevilla, hacía una rotonda en el monumento, con una circulación de sur a norte e incluso llego a contar con un sitio de taxis, que operó hasta finales de la década de 1980.
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La plaza Hijas de Tampico y una parte de la avenida, desapareció en los años de 1970 para dar paso a un mercado de comidas, con locales de diversos tipos, para después ser transformado en 1995 en lo que fue el mercado gastronómico, quedando solo la mitad de la avenida Centenario.
Será en el 2016, cuando mediante el proyecto integral de rescate de la plaza Hijas de Tampico y del nuevo mercado de la ciudad, que la avenida Centenario desaparecerá por completo, para dar paso a un área peatonal que conecta a la zona de la exAduana con el centro histórico de la ciudad, en una nueva transformación de la zona baja, por donde corría el afluente del río Tamesí.
De río a calle, de calle a plaza y después a mercado y zona de peatonal; el área que fue el arribo de miles de esperanzas a Tampico, no ha tenido un sentido único, siempre se puede dar la vuelta y tomar otro camino, lo saben quienes han pisado las aceras por muchos años, pues todas las calles tienen recuerdos, angustias y sueños perdidos, incluso aquellas que han desaparecido.