La pesca es la base de la economía de la región norte de Veracruz, lo que llevó al sector Conchero, ubicado en la colonia Congregación Anáhuac, en Pueblo Viejo, a utilizar residuos de la pesca del ostión como relleno para la construcción de las viviendas y de las vías de comunicación.
Todo terreno en el que se va a construir algún inmueble necesita, primeramente, relleno para poder nivelar el suelo y comenzar la edificación; para ello se puede utilizar escombros, tierra o piedra, pero en Congregación Anáhuac usa desde hace más de 60 años la concha del ostión.
"Conchero", comunidad dedicada al despique
Esta comunidad ubicada a un costado del canal que une al río Pánuco con la Laguna de Pueblo Viejo recibe el nombre de “Conchero” debido a que la principal actividad económica es el “despique”, como los locales le llaman a abrir ostiones.
Esperanza Cárdenas, quien actualmente reside en el sector Conchero, llegó a este lugar en 1981 y mencionó que desde antes que ella llegara a vivir aquí, la concha de ostión ya se usaba como relleno.
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Agrega que una draga sacó mucho ostión cuando hacían mantenimiento en el canal que conecta al río Pánuco con la Laguna de Pueblo Viejo, además los pescadores por su parte sacaban gran cantidad de este molusco, por lo que en la zona había cerros de conchas de ostión, es así como comenzaron a rellenar los solares con este material.
El ostión, una opción para evitar inundaciones
Griselda Herrera, otra habitante que desde que nació ha vivido en el Conchero, mencionó que “la zona estaba llena de manglares, con surcos y algunos lugares que les faltaba relleno”.
Este lugar se encuentra a nivel del mar, cuando se presentan las lluvias suele inundarse debido a que está rodeado por diferentes cuerpos de agua, por lo que han recurrido al uso del ostión para rellenar y estar a una altura donde el agua no provoque daños a sus casas.
“También la concha nos sirve para cuando se inunda, ponemos costales con concha y podemos pasar”, mencionó la señora Griselda.
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En tanto Esperanza comentó: “Teníamos la necesidad de rellenar estos solares para que no se inundaran porque son partes bajas y utilizábamos la concha para rellenar nuestros solares, hacer caminos para poder salir a las zonas altas y así se sigue ocupando actualmente”.
Las conchas, la única forma de rellenar terrenos
La residente desde hace 41 años en esta zona dijo que la concha era la única forma que tenían para poder rellenar sus terrenos, debido a que la colonia en los años 80 no contaba con un puente que conectara sobre el canal con Pueblo Viejo, y no había forma de que camiones con relleno pudieran llegar, además que su costo era más caro en comparación con la concha.
“Era lo más barato para rellenar, porque antes no había puentes para que pudieran pasar camiones con relleno”, afirmó.
Otra de las ventajas del uso del ostión para relleno, según los residentes, es lo económico, su propiedad para compactarse hace que al llover e inundarse sea más difícil de ser arrastrado por el agua. “No se rellena con tierra porque hay muchos solares baldíos y cuando llueve el agua se lleva toda la tierra; por eso arriba de la tierra se tiene que poner concha para que compacte bien”, agregó.
El ostión escasea
Debido a la sobreexplotación del molusco por parte de los residentes de esta zona, en la actualidad hay gran escasez de ostión, lo que afecta a los pescadores y residentes del sector Conchero.
Es una especie que se reproduce mediante larvas que buscan algún soporte (conchas o sustratos de la tierra) en el cual se va a desarrollar, por lo que una forma de preservar esta especie es regresar los caparazones al agua, para que otra larva de ostión pueda utilizarla.
Según menciona la señora Esperanza, esta era una técnica que se utilizaba en la zona, “había una lancha que le decían “La Guajolota” y ahí llevaban como collares de concha de ostión e iban a tirarla a la laguna para que el ostión volviera a reproducirse”. Pero con el pasar de los años, los pescadores dejaron de realizar esto, “había cerros de concha, y en vez de regresar la concha a la laguna la usábamos para rellenar los terrenos”, indicó la originaria de este lugar, Griselda Herrera.
Afectaciones en la economía de las familias
Esta sustracción y falta de acciones para preservar el producto ha generado que haya escasez que afecta la economía de las familias que dependen del “despique”, “cada día es más escaso el ostión, la gente sigue abriendo, pero no como antes”, dijo.
Congregación Anáhuac y en especial el sector Conchero ha extendido su área geográfica a base de concha de ostión, incluso hay zonas en las que antes solo era agua, ahora se ve una isla de ostiones, lo que hace única a esta región del municipio de Pueblo Viejo, por lo que no debe olvidarse la necesidad de aplicar acciones para mantener los cuerpos de agua y la producción ostrícola.