Pese a ser uno de los frutos preferidos de los tampiqueños, los árboles de jobito escasean cada vez más en esta zona sur de Tamaulipas.
Su frondosidad, ya que alcanza más de veinte metros de alto, cada vez es menos visible en diversas colonias de este puerto, donde anteriormente entre los meses de julio y agosto se notaban reverdecer y con gran cantidad de estos frutos amarillos.
Crecimiento urbano
En el puerto antes existían más árboles, de una gran variedad, pero la deforestación para la ampliación urbana y la falta de programas de siembra por parte de autoridades de los tres niveles de gobierno, han generado que estos sean cada vez menos.
Los de jobito han sido también víctimas del crecimiento urbano, ya que muchos han sido cortados y ahora son pocos los que se ven en diversos sectores de la ciudad, sobre todo en la zona norte y uno que otro por el centro.
Elvira del Campo de Tacea y Sonia Palomares, socias de clubes de Jardinería y Diseño Floral del puerto, consideran necesario impulsar la siembra de esta y otras especies, a fin de favorecer la reforestación y la cosecha de frutos.
El árbol de jobo, sus características
Su nombre científico es spondias mombin y pertenece a la familia de las anacardiáceas, pero se le conoce más como jobo.
Llega a medir 20 metros de altura, con copas amplias y la corteza presenta hendiduras con costillas escamosas
Crece en las zonas tropicales de América, desde México hasta Paraguay, pero este árbol tropical en la región es más común en municipios de la zona norte de Veracruz como Pánuco, Tempoal, Pueblo Viejo, Tampico Alto y El Higo; así como en entidades cercanas como San Luis Potosí e Hidalgo.
Su crecimiento es rápido y su cultivo puede ser por semilla o por estaca, comenta Elvira del Campo, quien añade que “necesita suelo arcilloso y mucho sol y puede crecer de 40 a 60 centímetros por año y sólo una vez por año da sus frutos, que en ocasiones son rojos”.
Cuando el árbol es joven, las hojas son de un color verde claro y sus frutos cuelgan en grupos y son de un color verde o amarillo, generalmente se maduran de julio a octubre.
Sequía les afecta
La producción de jobo se ha visto severamente afectada por la sequía que impacta la región noreste del país, ya que mientras normalmente maduran en julio, en este año ya estamos a mediados de agosto y aun falta maduración.
Rocío Delgado Cárdenas, quien tiene un árbol en su propiedad de la colonia Nacional de Tampico, dijo que “sigue dando fruto, aunque con cierto retraso por la falta de lluvias y un cuidado especial que le hemos dado a los árboles para que no se mueran".
Por la falta de lluvias algunos dueños de estos árboles han optado por regarlos con agua potable, por lo que el costo de producción se incrementa notoriamente y la producción por lo menos ha bajado 40%, lo que ha generado que el costo de la pulpa, agua, helados, nieves, paletas o dulces que se hacen con este fruto sea más alto.
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Un fruto muy tampiqueño
Para los tampiqueños la llegada del jobo es de las temporadas más esperadas, debido a su sabor agridulce; mientras que muchos turistas que están de visita este verano y no conocían esta deliciosa fruta, han quedado encantados.
Hay quienes lo llaman el manjar o el nectar de los dioses, lo cierto es que es un fugaz amor de temporada el que año con año vivimos en este puerto con el jobito, del que lamentablemente los árboles cada vez son más escasos.
Su nombre científico es spondias mombin y pertenece a la familia de las anacardiáceas, pero se le conoce más como jobo.
El árbol de jobo
Nombre científico: Spondias mombin
Familia: Anacardiáceas
El ÁRBOL
Mide hasta 20 metros de altura
Copas amplias
Corteza escamosa
Crece desde México hasta Paraguay
Abunda en huasteca veracruzana
Se siembra por semilla o estaca
Crece de 40 a 60 centímetros por año
Hojas verde claro
Comienza maduración en julio y termina en octubre
EL FRUTO
Da una vez al año
Cuelgan en racimos
Generalmente son amarillos
También hay rojos
Se conoce también como ciruela de agua, ciruela amarilla, jocote o xocote.
PROPIEDADES
Antioxidantes
Vitaminas A, B1, B2 y C
Calcio, hierro y fósforo
Mejora sistema inmune
Fuente: Clubes de Jardinería y Diseño Floral