La transición gubernamental detuvo en este año la aplicación de recursos federales para el mantenimiento de la red carretera que enlaza a Tampico con Ebano y Tuxpan, empeorando las condiciones de la carpeta asfáltica en ambos tramos.
El Consejo de Instituciones Empresariales del Sur de Tamaulipas planteó desde el año pasado la asignación federal de dos mil 400 millones de pesos para la restauración de poco más de 200 kilómetros de esos ramales, pero la asignación fue prácticamente de cero recursos, precisó su dirigente Eduardo Manzur Manzur.
La promesa del gobierno de Enrique Peña Nieto de terminar la autopista Tampico Tuxpam quedó trunca y lo que es peor ese trecho se encuentra como nunca antes, porque no hubo dinero para programas de mantenimiento y las lluvias y el intenso trafico vehicular destrozaron gran parte de la la carpeta asfáltica, convirtiéndose en un camino muy inseguro para los miles de usuarios que la utilizan cada día, agregó.
Un tramo de la autopista Tuxpan Naranjos, fue abierta hace algunos meses, pero más de ocho kilómetros se encuentran intransitables, convirtiéndose en una amenaza para los automovilistas, que la utilizan durante la noche, sin que tampoco se conozca si pronto habrá inversión para restaurarlas.
Insistió que la falta de conectividad moderna y segura entre Tampico y el norte de Veracruz, es una exigencia recurrente que el sector privado del sur de Tamaulipas, que ha venido planteando al gobierno del estado, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y los legisladores, ahora del partido del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
El líder del CIEST expresó que la falta de inversión pública que mejoren las conexiones carreteras hacia otros estados como San Luis Potosí y el aplazamiento de proyectos como la autopista Tampico Victoria, o de la costera que reduzca la distancia entre Altamira y la zona fronteriza, se viene padeciendo desde hace años y con ello limitando el crecimiento económico de la región.
El desinterés público de dotar de mejores carreteras que comuniquen a esta localidad, tiene un gran impacto en el desarrollo de los puertos locales, que dejan de recibir cargas y con ello el gobierno pierde anualmente el cobro de millones de pesos en impuestos, puntualizó.