Alarmante incremento de infartos cerebrales

Un promedio de 35 personas al mes presentan infarto cerebral donde la gran mayoría queda con secuelas graves, de acuerdo con datos de especialistas que destacan que muchos de ellos no se atienden con prontitud.

Con base en ello, el 96 por ciento de ellas afrontan problemas serios de movilidad o afrontan parálisis total ya que únicamente el 4 por ciento de la población que sufre este tipo de lesión en el cerebro, acude en las primeras cuatro horas de la crisis al servicio de urgencias del hospital.

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La embolia, que queda como secuela en estos pacientes, les impide la movilidad de la mitad de su cuerpo, no pueden hablar, ni comer, ni levantarse por sí mismos, refirió el entrevistado en su paso por el Aeropuerto Internacional de Tampico “General Francisco Javier Mina”, por lo que enfatizó es importante detectar los primeros síntomas de esta condición, que son cara aguada o flácida, dificultad para hablar, mano caída y pierna que no se puede mover.

El médico urgenciólogo refirió que el alto y alarmante índice de casos que se tiene en la ciudad, es consecuencia de que la población no acude dentro de las primeras 4 horas del suceso, por lo que la sociedad que representa se sumará a la Estrategia Mundial Camaleón y así enseñar a través de la difusión de videos y conferencias, sobre la importancia de acudir a las salas de urgencias en este lapso estipulado.

“Tenemos el medicamento para ayudar y quitar lo ocurrido, hay una estrategia mundial y nacional, Camaleón, que va a consistir en enseñarles a la gente a reconocer tempranamente los síntomas del infarto cerebral, para que llegue pronto a los hospitales, si llega antes de las 4 horas podemos ayudarlos, tiene años esta estrategia, vamos a tomarla y llevarla a las escuelas, para reducir el tiempo de espera y de llamado a la línea de emergencias”

Indicó que la diferencia con el infarto al corazón, es que en este padecimiento, se tiene un lapso de 12 horas para ser atendido sin complicaciones, por lo que se tiene un menor porcentaje de daños colaterales en la salud del enfermo cuando se sufre un cuadro de este tipo.