Mujeres de todas las edades viven un verdadero viacrucis todos los días en el transporte público y calles de esta zona sur de Tamaulipas al ser cada vez más víctimas de acoso.
La falta de leyes que sancionen estas actitudes generadas por varones las coloca en un alto nivel de vulnerabilidad, ya que el Bando de Policía y Buen Gobierno no establece éste como un delito.
La presidenta de la agrupación Frente Derecho, Justicia y Libertad, Nury Romero Santiago, aseguró que “la violencia doméstica y el acoso callejero o en transporte urbano es el más recurrente”.
En microbuses y autobuses de las diversas rutas “los hombres sin escrúpulos o respeto a la mujer aprovechan para pegar, arrimar o tocar a las mujeres, incluso hemos tenido casos en que muestran sus genitales”.
Ante el próximo regreso a clases y el aumento del uso del transporte las agrupaciones feministas han solicitado a autoridades del transporte público mayores medidas para salvaguardar a las mujeres.
A la agrupación han llegado 13 casos de violencia y acoso en transporte público, todos en camiones ya que en taxis la cantidad baja sustancialmente.
Romero Santiago aseguró que la violencia contra la mujeres es un fenómeno a la alza, donde en el 90% de los casos las féminas siguen viviendo o relacionadas con sus agresores.