Con una buena noticia para la ciudad encabezando su primera portada debutó en el puerto una nueva forma de informarse. Era 1950 y aquel 23 de noviembre los tampiqueños vieron por primera vez un símbolo que los seguiría a lo largo de varias generaciones, hasta volverse un ícono de las noticias en el puerto: El Sol de Tampico.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
La cadena de periódicos García Valseca ya contaba con varios diarios en las ciudades más importantes del país e inició una empresa en Tampico, teniendo como sede un pintoresco edificio en la calle Altamira, en el centro de la ciudad, que sería redacción, oficinas administrativas y talleres de esta casa editora hasta el año 2016.
Te puede interesar: #70Aniversario | De la tinta a los bits
Entre aquellas 18 notas de su portada de primera edición, El Sol de Tampico informaba a 8 columnas: “Aprobó Alemán la Construcción de las Obras de Tampico”; además de un accidente de trenes en Nueva York y sobre el enfrentamiento entre China y Estados Unidos en Corea; el costo del ejemplar:10 centavos.
El primer director del periódico fue Eduardo Martínez, después le siguió Mario Novoa, más tarde Leandro Martínez Bernal, luego Sabas Ricárdez, Fernando Alcalá Bates y desde 1954 hasta el 2010, Don Rubén Díaz de la Garza, quien estuvo al frente 56 años, a partir del 2010 y hasta el 2019, recayó en el señor Agustín Jiménez y desde el 2019 a la fecha el director del Sol de Tampico es el licenciado Benito Morante Silva.
A penas a 5 años de haber iniciado su trayectoria, el Sol de Tampico se enfrentó y sacó con éxito una de las coberturas más extraordinarias que se han registrado en la zona, la catástrofe derivada del Ciclón Hilda, realizando un despliegue informativo que dejó una huella en la historia de la ciudad y del periodismo en toda esta parte del país.
El talento de muchos académicos, escritores, cronistas y extraordinarios reporteros han colaborado en el esfuerzo de hacer grande a esta casa editora, que a su vez fue una escuela de periodismo, artes gráficas y fotografía para grandes personalidades del medio informativo, al ser una de la primeras empresas en está actividad y estar en constante modernización de sus procesos.
Ante los ojos de su lectores El Sol de Tampico transformó la presentación de las noticias, pues fue el primero en toda esta región en cambiar de un sistema de linotipos, donde el proceso de elaboración del periódico se hacía casi de manera artesanal a una rotativa de impresión offset, dando paso a las imágenes a todo color.
Así que a partir del mes de julio de 1966, a través de El Sol de Tampico, esta parte del país se puso a la vanguardia en las más avanzadas técnicas de impresión con la rotativa Goss-Urbanite, que dio un impulso importante en el diseño del periódico y la forma de presentar las noticias en el impreso.
Diez años más tarde, en 1976 El Sol de Tampico entraba a otra era, ya que el más importante conglomerado de medios impresos en México, la Organización Editorial Mexicana, adquiría la cadena de periódicos García Valseca, integrándose el rotativo del puerto a un dinamismo de información nacional y con un valioso respaldo para su crecimiento.
Desde sus inicios el periódico ha estado a la vanguardia de las tecnologías de todos los procesos para la realización de sus ejemplares, desde los equipos para impresión, los fotográficos, hasta los informativos, por eso cuando la modernidad exigió dejar las máquinas de escribir e ingresar al mundo de los procesadores electrónicos, la redacción se adaptó a este nuevo modelo de crear a principios de las década de 1990.
En los albores del nuevo milenio, la renovación que implica la incursión de las plataformas digitales en la realización de los periódicos, abrió nuevos caminos para la información y el replanteamiento en el modo de contar las historias, un reto que El Sol de Tampico asume con el mismo espíritu que hace 70 años.
Dotado ahora de vanguardistas instalaciones, al hacer su traslado en el año 2016 a un moderno edificio, casi en su misma ubicación tradicional, con toda la tecnología de última generación, el periódico entró de lleno a la fase digital, proponiendo en sus coberturas estéticas nuevas, no sólo en las redes sociales, sino en su impreso que sigue siendo el de mayor circulación en la zona.
En las páginas de estas siete décadas de historias se han escrito las desventuras, tragedias y dificultades que han tenido los habitantes de este hermoso puerto y sus alrededores; pero también las hazañas, éxitos y esperanzas de su gente. Ha sido el medio por el que la noticia llegó a su destino y por el cual expresó su voz.
Hoy con los nuevos bríos que da esta época de cambios, El Sol de Tampico sigue su tradición de llevar de manera veraz y oportuna la noticia y los hechos que conmueven, porque a 70 años de estar unidos por un compromiso de informar y registrar el acontecer, podemos decir que somos parte de la gente, que somos su historia.
