40 años en el arte del violín Arturo Esquivel Brandt

Fue el primer niño que tocó como solista en la Orquesta Sinfónica de la UAT y aún lo sigue disfrutando como la primera vez

Carmen Jiménez | El Sol de Tampico

  · viernes 13 de diciembre de 2019

Su interés por la música inició a los 11 años, el primer instrumento que llamó su atención fue el piano pero la vida le tenía reservada la oportunidad de descubrir en el violín, un estilo de vida, su compañera, su familia y grandes experiencias.

Arturo Esquivel Brandt comparte con EL SOL DE TAMPICO su extraordinaria trayectoria, trabajo y experiencias en 40 años de dedicarse a la música, especialmente al violín.

¿Cómo fue que inició en la música?

“Yo empecé a los 11, luego de que en unas vacaciones de verano una prima me enseñara a tocar y una de mis hermanas me llevara a la Facultad de Música, ahí me aceptaron aunque no había niños me permitieron presentar el examen de admisión, el que afortunadamente pasé”.

Ese sería el principio de una gran carrera y es que Arturo Esquivel Brandt fue el primer niño que tocó como solista en la Orquesta Sinfónica de la UAT y al piano ejecutó el concierto para piano de John Williams, experiencia que recuerda con gran cariño.

Su andar en la música lo llevaron a acompañar al piano a los niños que tomaban clases con la Mtra. María Teresa Cortinas y fue ahí impulsado por la reconocida maestra que inicia su camino en el violín.

¿Siendo un reconocido pianista, cómo inició en el violín?

“La Mtra. María Teresa me empezó a enganchar y me empezó a gustar en el violín, llegó el momento en el que preferí el violín, me sentía más a gusto y todo se fue dando, las oportunidades se me fueron dando la maestra María Teresa me prestó su violín porque yo no tenía ni posibilidad para comprar el mío y ella me fue llevando en el camino también de enseñar”.

¿Qué representó la relación y los conocimientos de la Mtra. María Teresa Cortinas?

A ella le debo todo lo que soy, el que yo tenga un violín en las manos que yo ni siquiera tenía pero ella me lo prestó, el que me haya enseñado a tocarlo, a transmitir y a comunicarme con él, se lo debo a ella. Para mí era súper usual tenerla cerca, yo estaba todos los días en su escuela, los fines de semana mi hermana tenía mucho contacto con ella, se iban a comer y pues yo también, realmente era algo muy natural.

¿Cuáles son los escenarios que han marcado su vida?

“Claro, tuve la oportunidad de tocar en la Camerata Regiomontana, después me fui a Xalapa en donde estuve en la Orquesta Juvenil, en Puebla toqué para la Orquesta del Estado de Puebla, hasta que regresé a Tampico, fuera del país he tomado cursos en verano en diversos institutos reconocidos que también guardo con mucho cariño”.

En su apreciación, ¿Cómo ve a las nuevas generaciones?

Fíjate que están súper diferentes, son muy rápidos, captan muy rápido, ellos traen muchas cosas muy naturales; sí les hace falta quizá lo que nosotros teníamos mucho que era coordinación, la cual te la daba el andar jugando, corriendo, trepando árboles y todas esas cosas que ellos no tienen, hay de todo, pero en unas cosas son muy hábiles que te dejan wow, pero algunos sí tienen algunos problemas de ejecución y ahí entramos nosotros como maestros.

Para finalizar, hoy en día ¿qué representa para usted el violín?

“Pues todo, es todo porque realmente hice mi vida en base a él, todo está relacionado, el tener contacto con los niños, enseñar, inculcarles algo no solo nota sino también valores, estudio, disciplina, amor por lo que están haciendo. El violín también es mi esposa, que también conocí por medio de la música, mis compañeros, todo está alrededor de ellos”.

Actualmente Arturo Esquivel Brandt es director de la Camerata María Teresa Cortinas, además es primer concertino de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma de Tamaulipas y actualmente se encuentra en un proceso de búsqueda con el fin de reinventarse, crecer y aportar a la música, especialmente a las nuevas generaciones y así avanzar social y culturalmente.