Así como cayeron los jugadores en el puente de vidrio, así se desplomó la criptomoneda inspirada en El Juego del Calamar. El valor de la divisa electrónica Squid colapsó el lunes a menos de dos semanas de que los inversores pudieran empezar a comprar estos tokens.
SE ADVIRTIÓ QUE PODRÍA SER FRAUDULENTO
Después de que el pasado domingo por la noche registrara un crecimiento de 310, 000%, Squid perdió toda su valor una vez que Twitter lanzó una alerta hacia la cuenta de la criptodivisa y la restringiera temporalmente debido a “actividad sospechosa”. Justo antes de su hundimiento, el valor del token había subido a 2 mil 856 dólares.
Squid se puso a la venta el 20 de octubre, con la idea de que la criptomoneda sería un token de pago para un juego en línea inspirado en la exitosa serie surcoreana, misma en la que personas muy endeudadas tienen que superar retos mortales con el fin de ganar una fuerte suma de dinero.
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El juego virtual iba a lanzarse en noviembre y sus promotores dijeron que los ganadores serían recompensados con más tokens Squid. Pero incluso cuando el precio de la criptomoneda se disparó la semana pasada, muchos señalaron que el token podría ser fraudulento.
“PERDÍ TODO LO QUE TENÍA”
Los inversores estaban teniendo problemas para vender sus tokens y señalaron que su libro blanco -el documento electrónico que sustenta cualquier criptodivisa- estaba lleno de errores de ortografía. En tanto, los creadores de Squid podrían haberse hecho hasta con 2.1 millones de dólares tras la caída del token, según portales especializados.
CoinMarketCap, un sitio web de seguimiento de precios de criptodivisas, advirtió a los posibles compradores de la posible naturaleza fraudulenta de Squid. Un testimonio anónimo dijo al portal: “Perdí todo lo que tenía en este proyecto”, después de invertir 5 mil dólares en la criptomoneda.
Expertos han advertido a inversores tener cuidado al considerar la compra de criptodivisas “meme”, basadas en fenómenos culturales, incluso si parece que la moneda va bien en el mercado.