La política del actual gobierno a través de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) denota un abandono del campesino mayor al que existía hace tres años y un decrecimiento en el sector en el mismo lapso de 4.5 puntos en 2021.
“Si bien es el único sector que creció este año, también es una realidad que solo fue de 2% cuando se tenía un 6%. Por lo tanto, hay un decrecimiento de casi 4% y con ello 4 millones más de pobres en el medio rural”, afirmó Federico Ovalle Vaquera, secretario general de la Central de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC).
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Sostuvo que en los tres primeros años del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, no hay una evaluación objetiva por parte del Jefe del Ejecutivo sobre los aciertos y errores, resultados y problemática en el campo, ya que en campaña y como gobernante ofreció respetar al medio rural así como la transformación y autosuficiencia alimentaria, pero esto nunca llegó.
Precisó que “sin soberanía ni autosuficiencia alimentaria, se carece de un rescate al campo mexicano a tres años de gestión del actual gobierno; pero sí hay 4 millones más de pobres en el medio rural”.
Afirmó que la importación de alimentos en general aumentó. En el caso concreto del maíz son casi 4 millones más de toneladas con respecto a 2018.
Dejó en claro el dirigente de la CIOAC “que no es cierto que se apoye más a los pequeños productores, sino más bien se apoya a los que no son productores, esto es los organismos empresariales y de exportación”.
Señaló además que la austeridad republicana que enarbola el gobierno de la 4T, se refleja negativamente en la Sader, dependencia que perdió ya el 50% de los recursos asignados anteriormente: 12 mil millones de pesos, en el primer año de gobierno: 20 mil millones de pesos del segundo y 5 mil millones de pesos del tercero y ahora, habrá una reducción a pesar de que el monto aprobado en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2022 (PEF) tiene un ligero crecimiento.
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Hizo hincapié en que se deben considerar las diferencias entre lo que se aprueba y lo que se ejerce y lo que no se ejerce a través de los subejercicios o bien lo que se ejerce mal y que termina en un promedio de 8,000 a 10,000 millones de pesos en reducción del gasto programado para Agricultura.
Y concluyó:
“Para el 2022 habrá nuevamente decrecimiento del presupuesto destinado a actividades productivas, al mejoramiento de infraestructura, a la producción, caminos, presas, sistemas de agua y asistencia técnica, rubros que de atenderse de manera adecuada, podrían elevar la producción agropecuaria y permitir la autosuficiencia alimentaria”, dijo Ovalle Vaquera.