La llegada de la pandemia trajo una serie de retos para la industria en Altamira, donde se concentra más de 70% de la petroquímica del país.
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En el corredor industrial de la zona sur de Tamaulipas las empresas afrontaron el Covid-19 de forma responsable, con una visión humana, poniendo en primer lugar la seguridad de sus colaboradores y sus familias.
Hoy, con una capacidad resiliente, se han adaptado a este nuevo entorno, esforzándose por recuperar parte de lo perdido desde que inició el embate del virus llegado de otras latitudes.
El presidente de la Asociación de Industriales del Sur de Tamaulipas (Aistac), Fernando Ramírez Rosas, en entrevista para #SomosIndustria aseguró que prácticamente todos los afiliados fueron calificados como empresas esenciales.
“No hubo prohibición de continuar en el trabajo. Si se analiza veremos que la industria del plástico, papel, envase de los alimentos y productos médicos que se requieren en una situación de pandemia tomaron un papel importante; sabemos que los insumos a hospitales tienen que ver con todo lo que nosotros proveemos como materia prima a los sectores alimenticio, médico e higiene”, dijo.
Ante el desafío de la pandemia, las industrias en Altamira implementaron protocolos como medidas de control en el ingreso del personal a las plantas, pasillos desinfectantes, gel antibacterial, cubrebocas, careta, tapetes desinfectantes, puntos de lavamanos en diferentes sitios, sanitización profesional en diferentes áreas, barreras físicas en comedores y se trazaron más rutas de transporte para evitar que los trabajadores tuvieran que transbordar para llegar su trabajo.
“Enfrentamos la pandemia con actitud y compromiso, además de responsabilidad y mucha creatividad; se le dedicó mucho tiempo a tratar de contrarrestar y poner barreras, aunque ninguna era suficiente para la industria, implementamos las restricciones que definió la Secretaría de Salud que hizo un papel muy bueno y nosotros incluimos otras”, señaló el presidente de Aistac.
Al personal vulnerable -mayores de 60 años, hipertensos y embarazadas- los enviaron a casa con goce de sueldo y les dieron seguimiento médico. Mientras que se implementaba el trabajo en casa entre personal administrativo, a quienes apoyaron con computadoras y celulares.
“Una de las salvaguardas que teníamos era evitar el contacto y si se tiene a todo el staff en planta se pone en riesgo a mucha gente, la base administrativa se fue a trabajar a su domicilio, solo se quedaron los esenciales en operación”.
IMPACTO ECONÓMICO DE LA PANDEMIA
La llegada del coronavirus fue un evento inédito con efectos globales en la contracción en la economía, más fue cuidar la salud de los colaboradores y su familia lo fundamental.
“Ese punto fue para nosotros la prioridad, así como la preservación del empleo”, dijo Ramírez Rosas, quien destacó que muchas de las empresas de la zona tuvieron severas afectaciones en el tema económico y algunas cerraron.
Afortunadamente la industria se determinó como esencial y siguió operando, sin embargo, hubo países donde cerraron puertos y el comercio internacional se vio afectado.
“Con la buena administración y el nivel que tienen las empresas en las industrias que sí compiten con el primer mundo y nuestro personal que también está preparado, logramos salir adelante, no hubo una sola empresa que se viera afectada y se mantuvo el ingreso de las personas, no se dieron esas liquidaciones que ocurren cuando hay una crisis económica, sin duda todos cerramos filas, por ello es importante dar un reconocimiento a todos nuestros trabajadores y a sus familias”, enfatizó.
PERSPECTIVAS PARA EL SEGUNDO SEMESTRE
Pese al embate que representó el 2020 con la incertidumbre provocada por la pandemia, el cierre por falta de personal de plantas productoras de Estados Unidos que generan las materias primas para la industria, puertos cerrados en Asia y otros lugares del mundo que limitaron pudieran llegar los productos, la perspectiva para el sector en 2021 es buena.
“En la primera mitad del año -2020- no hubo los beneficios que se esperaban, sin embargo, el cierre fue bueno, muchas de las empresas recuperaron gran parte de lo que no se había logrado, prácticamente la mayoría recuperó su objetivo y en el arranque de este año hay mayor actividad económica, hoy estamos en un incremento”, precisó.
El puerto de Altamira tiene un incremento de 16% de su volumen en carga respecto a los cuatro meses del año anterior, por lo que la perspectiva para el segundo semestre es buena, debido a que las empresas están teniendo requerimientos de sus productos.
El trabajo actualmente es a toda capacidad, “a lo mejor restringidos en materias primas por lo que ocurrió en Estados Unidos en la última temporada de invierno que se tuvieron bajas temperaturas y cerraron plantas dejando de abastecer a la industria, es algo de lo que apenas Estados Unidos está saliendo y a nosotros nos deja un rezago en la entrega de producto terminado para los consumidores en el mundo, ya que más de la mitad de la producción generada aquí se mandan al extranjero”.
Sobre las inversiones planeadas para la parte industrial en Altamira, el presidente de la Aistac consideró que sí se tuvieron inversiones pausadas que se irán retomando.
“Realmente vienen más, lo que se ha escuchado es que vienen muchas inversiones, es una realidad; lo que tenemos que trabajar nosotros es no tener situaciones que puedan afectarnos y ver cómo atraer inversiones. Siempre que tengo oportunidad de hablar con autoridades les comento que somos un equipo, porque ellos tienen que poner el terreno fértil para que sea atractiva la zona y nosotros como industriales tenemos que salir en la búsqueda de nuevos proyectos”, finalizó el representante del sector.
EMPRESAS PETROQUÍMICAS EN AISTAC
- BASF
- Cabot
- Chemours
- Dynasol
- Alpek
- Styrolution
- Lanxess
- MG Polímeros México
- Mexichem
- México Carbon
- Sabic
- Styropek
