Un cocodrilo de casi cuatro metros de longitud fue hallado mientras devoraba restos humanos, cerca de un canal en Estados Unidos.
El hecho ocurrió en el condado de Pinellas, en Florida. De acuerdo a un boletín de la oficina del sheriff, luego de un reporte ciudadano que notificó la presencia de un cadáver en la vía de agua, acudieron al sitio para retirar al animal y realizar los servicios periciales correspondientes.
El caimán fue sacrificado
El reporte fue realizado el pasado viernes 22 de septiembre, aproximadamente a la 13:50 horas. Los agentes del equipo de buceo del condado recuperaron los restos de la persona fallecida.
En tanto las autoridades, con la ayuda de la Comisión para la Conservación de la Pesca y la Vida Silvestre de Florida (FWC, por su siglás en inglés), sacrificaron y retiraron del ducto al enorme caimán macho. Se indicó que la oficina del médico forense realizó una autopsia para determinar la causa y la forma de la muerte.
Para el día 23, la víctima fallecida logró ser identificada. Según reportaron autoridades del condado, se trataba de Sabrina Peckham, de 41 años. La forma y la causa de la muerte aún se están determinando, según la oficina del médico forense.
"Nadie merece morir así"
Por su parte, Breauna Dorris afirmó ser hija de la mujer identificada, y confirmó que el caimán atacó a su madre. Afirmó que Sabrina Peckham era una mujer sin techo, que acampaba en la zona boscosa cercana al canal.
"Se cree que pudo haber estado caminando hacia o desde su campamento cerca del arroyo en la oscuridad y el caimán atacó desde el agua", indicó Dorris en una publicación realizada en su cuenta de Facebook.
Mencionó que iniciaría una campaña de donación en línea, ya que el suceso tomó por sorpresa a su familia, y no cuentan con los medios para darle una sepultura adecuada a su madre. "Nadie merece morir así", indicó.
Sigue el canal de EL SOL DE TAMPICO en WhatsApp
De acuerdo a la Comisión de Pesca y Vida Silvestre de Florida, se ha experimentado un enorme crecimiento demográfico de caimanes en los últimos años, lo que ha incrementado el riesgo de interacciones mortales, como resultó en el caso del caimán hallado en un canal devorando restos humanos.
