El deseo por pintar y dar muestra del cariño por su nieta Paulette llevaron a Enrique Ayala, un tierno abuelito que diseño una chamarra sin imaginarse que la enternecedora historia se haría viral.
El egresado de la Escuela Nacional de Artes Plásticas explicó en entrevista para EL SOL DE TAMPICO que el “gusanito” por pintar es algo que ha estado presente en su vida siempre, sin embargo, hoy en día se ha convertido en una oportunidad de hacer felices a su familia y seguidores.
LA PRIMERA DE 100 CHAMARRAS, POR @_ENRIQUEART
Enrique Ayala, explica que su nieta le pidió que pintará un Dumbo en su chamarra y al concluirla ella decidió compartirlo con sus amigos en redes sociales sin imaginarse que serían casi 100 chamarras las que serían intervenidas con sus pinceles.
“Tengo una especialidad en diseño y grabado de moneda y trabajé por 30 años en el área de grabado de la Casa de Moneda, entonces un día mi nieta me dijo porque no me haces una chamarra sin imaginarme que haría muchos diseños más”.
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Al concluir la elaboración de esa chamarra la cual tiene detalles del personaje de Disney, diversas personas se dieron a la tarea de contactar a don Enrique para que creará para ellos diversos diseños más.
CARICATURAS, RETRATOS Y MOMENTOS ESPECIALES
El artista plástico radicado en la Ciudad de México explicó que gracias a que su trabajo se fue haciendo viral poco a poco las personas pedían diversos proyectos, todos llevaban cierto tiempo de elaboración y cariño por el arte.
“Me empezaron a pedir varios diseños no solo en chamarras también en tenis, playeras y hasta lienzos pequeños, hice diversas figuras, caricaturas, películas, retratos. Siempre me gusta decir cuanto me voy a tardar porque es un proceso lento y trato de no saturarme para que todo quedé bien hecho”.
Además de pintar prendas de vestir y calzado Enrique Ayala, también crea pinturas al óleo en formato pequeño y vuelve a su profesión del grabado.
SU NIETA, UN GRAN APOYO
Con gran paciencia el pintor explica que sí bien su nieta Paulette fue la primera que recibió una chamarra pintada por él, ella se ha convertido en su gran apoyo y siempre está al pendiente de todos los trabajos que él desarrolla.
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“Siempre estamos tratando de ofrecer lo mejor de nosotros, ella me ayuda mucho en todo lo que hago porque ella sabe que lo hago con mucho gusto, es una gran satisfacción ver como le gusta al público y siempre trato de hacer lo mejor posible”.
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Por último el abuelito que inició diseñando una chamarra a su nieta invitó a la sociedad a conocer su historia en el arte a través de sus redes sociales y también aseguró que ya sea en lienzo o chamarra seguirá pintando.