A lo largo y ancho de las 144 mil 530 hectáreas que conforman la Reserva de la biosfera El Cielo, en Tamaulipas, viven multitud de especies de flora y fauna. Hoy hablaremos de un ave de hábitos diurnos con preferencia por los bosques y los climas tropicales, nos referimos al tecolote bajeño, también denominado “pavita”.
El nombre científico de la especie es Glaucidium brasilianum. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza considera que su estado es de preocupación menor. Dicha taxonomía implica que, por el momento, no existen señales de alarma de que el ave pueda desaparecer en estado silvestre.
¿En dónde se puede encontrar el tecolote bajeño?
El Laboratorio de Ornitología de Cornell cataloga al tecolote bajeño como un ave común que se puede encontrar a lo largo del continente americano, en países como Nicaragua, Colombia, Ecuador, Perú, Argentina, Uruguay y Paraguay, además de algunas zonas de México y Brasil.
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De acuerdo con la Sociedad Nacional Audubon existen avistamientos del ave en la región sur de los estados estadounidenses de Texas y Arizona, aunque dicho fenómeno migratorio no es frecuente.
El ave de muchos nombres: población, dieta y procreación
Gracias a la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) sabemos que el tecolote bajeño también es conocido como: mochuelo común, chuncho del norte, caburé, caburé chico o buhito ferrugíneo.
La Sociedad Nacional Audubon estima que a nivel mundial existen cerca de 20 millones de ejemplares, con plumaje de diversos colores, ya sea negro, rojo, marrón, blanco o amarillo.
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El tecolote bajeño se alimenta principalmente de otras aves, además de insectos, roedores y lagartijas. Su dieta incluye, entre otros especímenes, a grillos, orugas, escarabajos y escorpiones. Esta ave caza durante el día y la tarde, descendiendo en picada cuando observa a su presa desprotegida.
Cada anidación suele contener entre cuatro a cinco huevos, los cuales tardan un aproximado de 28 días en eclosionar.
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Quien decida emprender un paseo por la naturaleza en la Reserva de la biosfera El Cielo, en Tamaulipas, escuchará múltiples ruidos provenientes de la fauna que allí habita. Uno de esos sonidos será el ulular del tecolote bajeño y, con un poco de suerte, quizás se le pueda ver sobrevolando el bosque tropical del noreste de México.