La fertilidad es la capacidad de procrear y traer al mundo a un bebé, desafortunadamente algunas parejas enfrentan complicaciones, por lo que se ven obligadas a recurrir a tratamientos costosos en la iniciativa privada, ya que estos servicios en las instancias de salud pública no se contemplan.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en su Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (Enadid) 2023, arroja que el total de población en México fue de 129.5 millones de personas: 51.7% correspondió a mujeres y 48.3%, a hombres. Con una tasa de fecundidad en la población femenina de entre 15 y 49 años de 1.60 hijas e hijos. Dicha cifra descendió con respecto a 2018, año en el que se estimó en 2.07.
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En el caso de las adolescentes de 15 a 19 años que iniciaron su vida sexual, 66.9% usó un método anticonceptivo en su primera relación. Con un aumento en comparación con 2018, año en que la cifra fue de 59.9%.
Carente en el sector público la fertilización
La médico cirujana, Graciela Guadalupe Arana Franco, explicó que si bien es cierto hay una mayor población de mujeres que acuden a las instancias de salud a solicitar ser asesoradas sobre como pueden llegar a concebir a su bebé, por desgracia se topan que no existe algún departamento específico.
“En servicio médico público no hay, al menos no hay un área específica para ayudar en la fertilidad asistida, sino únicamente con ginecología y obstetricia. Además se ofrece en primer nivel y segundo nivel consulta preconcepcional así como métodos de planificación familiar”, dijo.
Es en ese instante cuando las parejas tienen que tomar la difícil decisión de resignarse a no lograr la concepción de un nuevo ser o buscar la ayuda de algún especialista dentro de la iniciativa privada que les permita traer el milagro de la vida, aunque eso implique hacer uso de todos sus ahorros.
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Fertilización In Vitro o inseminación artificial
El ginecólogo con subespecialidad en Medicina Reproductiva, Lauro Saavedra Portales, explicó que al verse limitada la fertilidad, es el momento cuando se requieren nuevas técnicas para obtener un embarazo natural como de reproducción asistida.
Agregó que tanto él como sus colegas especialistas sugieren que las mujeres menores de 35 años tienen una mayor probabilidad de lograr un embarazo exitoso mediante técnicas como la Fertilización In Vitro (FIV) o la inseminación artificial.
Esto se debe a que la calidad de los óvulos tiende a disminuir con la edad, afectando la concepción, subrayando la importancia de considerar la edad al planificar tratamientos de fertilidad.
"Mientras más joven y no existan otros factores, las probabilidades de lograr un embarazo son mayores.
El tratamiento son dos consultas: la primera es para revisión, se realiza un ultrasonido pélvico, se hace un historial clínico, si se sospecha en la primera consulta de algunas alteraciones se solicita estudios y se determina el tratamiento a seguir", detalló.
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Toma nota de los tratamientos disponibles ene clínicas privadas
Saavedra destacó que actualmente existen diferentes tratamientos para mujeres y hombres que quieren un embarazo y no lo han logrado por diversas circunstancias, entre los cuales se encuentra la Fertilización In Vitro, que implica la extracción de los óvulos por medio de un aspirado folicular.
Mientras que aquellas de menor complejidad es la inseminación artificial, que consiste en el depósito de espermatozoides en la mujer empleando instrumental especializado, implantándose en el útero, en el cérvix o en las trompas de falopio, con el fin de lograr la gestación.
Sin olvidar la inyección intracitoplasmática de espermatozoides, procedimiento que se usa en caso de infertilidad masculina o aquella conocida como sin causa, misma que consiste en aislar un solo espermatozoide e inyectar en un óvulo maduro utilizando instrumentos microquirúrgicos.
Ambos especialistas coincidieron que los procesos de reproducción asistida no solo son empleados para las parejas que tienen problemas de fertilidad, sino también para las mujeres que quieren tener hijos sin padres, parejas homoparentales, entre otras, pero todas tienen que tomar en cuenta que el factor determinante para el éxito es la edad.
El precio de la fecundación in vitro va de los $50 mil a los $200 mil, siempre dependiendo de la clínica de fertilidad a la que se acuda, el número de intentos para embarazarse y si son necesarias pruebas adicionales para garantizar la fecundación.
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El precio en inseminación artificial ronda los $40 mil aproximadamente, siempre dependiendo de la clínica que elijas y otros factores relacionados con el procedimiento, como el medicamento de estimulación, exámenes médicos y consultas con ultrasonido.