En México, aproximadamente 50 por ciento de la población general, alguna vez en su vida sufrirá dolor de cuello (cervical), debido a la mala postura al sentarse o al usar dispositivos electrónicos, afirmó la fisioterapeuta Adriana Echeverría.
La académica de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) León de la UNAM alertó que esta alteración puede ocasionar malestar en la cabeza, en la parte alta de la espalda y en los hombros, y cuando la alteración es crónica, surgen problemas de equilibrio y caídas.
Apuntó, que, en el trabajo, si la pantalla de la computadora está por debajo de la altura de la vista, la cabeza se fuerza en una posición de flexión que, si se mantiene mucho tiempo, provoca dolor. También, ver televisión con la espalda encorvada, o el uso incorrecto de teléfonos inteligentes, hace que las personas adopten posiciones inadecuadas.
“Cuando estamos en una posición alineada, la cabeza pesa de 4.5 a cinco kilogramos, pero al ver el celular, la cabeza se inclina hasta 45 grados, con lo que llega a pesar hasta 22 kilos. Este movimiento también lo adoptamos cuando limpiamos o escribimos”.
En un comunicado, indicó que según el grado de dolor, una cervicalgia mecánica (no tienen que ver con una lesión directa, un impacto o un accidente, sino con espasmos musculares) puede ser discapacitante.
“Durante las actividades cotidianas hacemos movimientos que comprometen la rotación o flexión del cuello, y si duele, habrá dificultades para trabajar, manejar e incluso dormir”.
La especialista expuso que los problemas de postura ocurren por la forma en que colocamos el cuerpo al realizar diversas tareas. “Puede volverse un hábito, y si se mantiene durante mucho tiempo repercute en nuestra salud”.
Ejemplificó, que de manera frecuente, al caminar inclinamos el cuerpo, lo que provoca cambios biomecánicos que afectan el equilibrio muscular: “la cabeza se adelanta y entonces algunos músculos trabajan de más para mantener esa postura. Esto ocasiona dolor en el cuello, fatiga muscular y alteraciones del equilibrio, pues no sólo el cuello cambia su posición, sino también la columna.
Dentro de los dolores cervicales mecánicos está el cervicogénico, en el que la zona de molestia es la nuca, porque los pequeños músculos que unen al cuello y la cabeza están en una posición forzada; incluso pueden impactar en la articulación temporomandibular o en la oclusión de la mandíbula.
“Inicialmente no se sienten molestias de consideración, pero con el paso del tiempo se agravan. Los vicios posturales inician con el simple hecho de que el paciente esté sentado en una mala posición, pues afecta sus lumbares y cervicales”, recalcó.
Subrayó que no hay rango de edad prevalente para sufrir dolor de cuello. Por ejemplo, los niños que van a la primaria y llevan mochilas pesadas que los obligan a inclinar su tronco comienzan desde entonces con estos vicios, pero las repercusiones se presentarán en la edad adulta.
Abundó que la mayoría de las personas que llegan a consulta fisioterapéutica, ya presentan dolor, que corre hacia la cabeza, a la parte anterior de los hombros o a la espalda alta. Es importante indagar cuál es el origen de los síntomas para dar un tratamiento adecuado, lograr un cambio en la postura y eliminar el dolor.
“Hay varias alternativas: algunas son analgésicas, como el calor, o la electroterapia, que ayuda a disminuir los síntomas; sin embargo, la base es el ejercicio y la terapia manual para alinear la postura, además de mejorar la respiración y el equilibrio”.
La prevención es la principal pauta, y en este sentido contribuyen acciones como posicionar la computadora de manera adecuada, usar el celular a la altura de la cabeza o tener una buena postura al sentarse. Con un tratamiento idóneo se puede conseguir una mejoría significativa para evitar dolores cervicales, puntualizó.