Entonces, un día descubres que no le gustas y, por supuesto, tampoco tiene intenciones de seguir conociéndote. Tus sentimientos no son correspondidos, tus expectativas se van a pique y no sabes muy bien cómo reaccionar ante la situación.
Surge, entonces, la pregunta: ¿Cómo afrontar el rechazo amoroso sin perder la dignidad? A continuación, seis consejos útiles.
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¿Qué es el rechazo amoroso?
El Diccionario del Español de México define la palabra “rechazar” bajo las siguientes acepciones: “Hacer una persona o una cosa que otra persona o cosa se aleje o se separe de ella” o “Negarse alguien a aceptar alguna cosa”.
La misma fuente puntualiza el significado de “amor” como “sentimiento, deseo, impulso de afecto, ternura y solidaridad por alguien”.
Entonces, el rechazo amoroso podría considerarse la negativa de una persona a recibir y corresponder las muestras de afecto y atracción de alguien más.
Por su parte, el término “dignidad” se refiere a la “cualidad de hacerse valer uno como persona o de tomar con responsabilidad y resolución lo que ha elegido para sí” y también “actitud de apego a determinados valores morales y de intolerancia por todo aquello que los viole o comprometa; honestidad con uno mismo que se hace reconocer y valer a los demás”.
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Por lo tanto, afrontar un rechazo amoroso con dignidad implica asumir de manera consciente, con el mejor de los talantes, el hecho de que alguien no se sienta interesado hacia ti, en la forma en la que a ti te gustaría.
¿Cómo lidiar con un rechazo amoroso?
Ante todo, mantén la compostura. Nadie está obligado a sentirse atraído hacia ti o a quererte.
La organización “Kids Health” indica que todas las personas, a lo largo de su vida, alguna vez van a ser desestimadas. El rechazo significa, desde su perspectiva, que “una vez, en una situación y con una persona en concreto, las cosas no han salido bien”.
El sitio aconseja las siguientes medidas para lidiar con el rechazo:
- Número uno, ante todo la honestidad. Reconoce y afronta tus sentimientos. Examina su causa y su intensidad. Puedes hacerlo en privado o buscar hablar con una persona de confianza, quien te escuche sin establecer juicios de valor sobre tus emociones. De ser necesario, llora
- Número dos, mantén el buen ánimo. No te obsesiones por el más reciente fracaso de tu vida amorosa, no le dediques todas las horas del día a pensar acerca de ello, ni intentes analizar la situación desde todas las aristas imaginables. Trata de distraer tu mente con alguna actividad
- Número tres, realiza un examen de conciencia. No atentes contra tu propia autoestima intentando entender el por qué del rechazo. Cuando pienses acerca de él, atente a los hechos ocurridos, no a suposiciones. Es importante evitar asumir toda la culpa o hacerse menos Por ejemplo, es más adecuado tomar la postura “me rechazo porque no está interesado (a)”, en lugar de “me rechazo porque soy media rara y cito las tragedias de Eurípides cada dos por tres”.
- Número cuatro, no perder la perspectiva. No permitas que una situación arruine la opinión que tienes acerca de ti mismo (a). Recuerda quién eres, cuáles son tus cualidades, cuáles los logros que has tenido en la vida y acepta el crédito por haberte atrevido a intentar algo con esa persona
- Número cinco, considera el rechazo como una oportunidad. ¿En tu opinión, que podrías hacer diferente para la próxima ocasión? ¿Cuál fue la lección que aprendiste?
Otro consejo clave también es: enfoca tu energía en algo productivo. Opta por leer, escribir, dibujar, recurrir a la fotografía, al cine o a la música; sal a tomar un paseo, arregla tu casa, desbloquea un nuevo nivel en los videojuegos, atiende tus pendientes, convive con tu familia o entra en contacto con tus amigos. Como diría Eurípides: “la vida es lucha”.
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Entonces, ¿cómo afrontar el rechazo amoroso sin perder la dignidad? Las claves son: trabaja en ti e intenta sanar. No le escribas a esa persona para reclamar y, mucho menos, para suplicar su atención. No le gustaste, no pasa nada, quiérete tú.
