En mayo de 1932, Amelia Earhart hizo historia. Se convirtió en la primera mujer en cruzar el Atlántico en solitario. Cuando el NYT dio la noticia del evento, la llamaron “señora Putman”. Ella le envió una carta al director del periódico exponiendo: “Mi nombre es Amelia Earhart, soy aviadora, no señora de Putman”. Esta es la historia.
¿Quién era Amelia Earhart?
Amelia Earhart nació el 24 de julio de 1897, en Kansas, Estados Unidos. En 1918, trabajó como enfermera voluntaria en Toronto, Canadá, durante la Primera Guerra Mundial. En ese lugar, desarrolló un rápido interés en la aviación.
En 1921, Earhart se enlistó en la escuela de aviación de Neta Snook. Un año después, compró un aeroplano de segunda mano, al cual nombró “El Canario”. En 1923, dueña de su propio avión, después de completar cinco horas de vuelo previas, la Federación Aeronáutica Internacional le concedió la licencia de vuelo.
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En 1931, Earhart contrae matrimonio con George Palmer Putman, un publicista, con el cual había trabajado años antes en lo que es considerado, por muchos, el primer vuelo sobre el Atlántico de Earhart. Sin embargo, la misma piloto declaró, en multitud de ocasiones, que ese mérito no era suyo, sus compañeros Gordon y Stultz habían hecho todo el trabajo.
La carta al New York Times
El 20 de mayo de 1932, Amelia Earhart despega desde la isla canadiense de Terranova con el objetivo de cruzar, por primera vez, sola, el océano Atlántico. Y lo logra. Trece horas después aterriza en Irlanda del Norte.
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Los medios enloquecieron. Earhart no solo era talentosa, también era bella e inteligente. El periódico New York Times le dedicó múltiples notas a sus hazañas de aviación. No obstante, en lugar de escribir su nombre como “Amelia Earhart” se referían a ella como “señora de Putman”.
Entonces, ella decide, de manera cordial, enviar una carta al editor en jefe del periódico, Arthur Hays Sulzberger, el 28 de junio de 1932, donde escribe:
“¿Me permite hacerle una petición al Times a través de usted? A pesar de haber expresado mis deseos y los de G.P.P con anterioridad, ustedes se refieren a mí continuamente como "Señora Putman" cuando me mencionan en sus columnas. Creo que las aviadoras deberían tener los mismos privilegios que las escritoras o las actrices”.
La carta fue reproducida y compartida, en el 2017, a través de redes sociales por la actual jefa de redacción del New York Times, Carolyn Ryan. La imagen estaba acompañada con el mensaje: “Amelia Earhart pidió no ser llamada con el nombre de su marido. Funcionó”.
¿Cuál fue el final de la historia?
El 21 de mayo de 1937, Amelia Earhart en compañía de su copiloto Fred Noonan despegaron desde Florida, Estados Unidos, con el objetivo de dar la vuelta al mundo siguiendo la línea del Ecuador.
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El 02 de julio de 1937, Earhart y Noonan desaparecieron. El Gobierno de Estados Unidos realizó una búsqueda por la región de Papua Nueva Guinea, último lugar de las comunicaciones. El esposo de Earhart, George Palmer Putman reunió fondos para una expedición privada en la zona tratando de localizar a su cónyuge.
Todos los intentos fueron infructuosos. Nadie nunca volvió a ver ni a Fred Noonan ni a Amelia Earhart. Ella fue la primera mujer en cruzar el Atlántico. También fue una ávida defensora de la independencia femenina, cuando en 1932 escribe al NYT: “Mi nombre es Amelia Earhart, soy aviadora, no señora de Putman”.