El café es un referente casi obligado en la mayoría de los hogares y oficinas. Conocido por sus efectos estimulantes y por aumentar la vitalidad, se convirtió en una bebida muy popular. Hoy en día, uno de sus compañeros más fieles son los filtros de café. Los usas casi todas las mañanas, pero ¿sabes quién los inventó y por qué?
Se llamaba Melitta Bentz, era una mujer alemana, esposa y madre de familia de dos hijos, quien, aficionada al café, disfrutaba tomarlo de manera asidua. Solo había un problema, los restos de café molido, que invariablemente se quedaban pegados en la lengua y el paladar, le resultaban muy molestos.
El inicio de la historia
De acuerdo al artículo “Quién fue Melitta Bentz, la mujer que inventó el filtro de café (y cómo se convirtió en una exitosa empresaria que revolucionó la industria)”, publicado por la BBC, esta es la historia detrás del producto.
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En algún momento antes de 1908, Bentz comenzó a experimentar con diversas técnicas para separar el líquido de los restos de café molido. Un día, dio con una idea clave.
Primero, realizó agujeros en una vieja olla, después colocó el café dentro de una hoja de papel que arrancó del cuaderno de uno de sus hijos, vertió agua caliente y contempló como el líquido que escurría, dentro de la taza, tenía sabor, textura y aroma a café, pero carecía de residuos. El asiento del café permanecía intacto dentro de la hoja de cuaderno.
En ese instante, sin saberlo, el mundo vio nacer en una cocina de la ciudad de Dresde, en Alemania, la primera versión de los filtros de café.
Comienza el segundo acto
Satisfecha con su invento, Bentz comenzó a invitar a familiares y amigos a “las tardes de café”, para saber su opinión al respecto. La aceptación fue inmediata. En 1908, patentó el producto y casi al instante, junto con su marido, Hugo Bentz, comenzó a comercializarlo en tiendas, almacenes y ferias.
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De pronto, la casa de los Bentz se convirtió en un taller de producción, en donde toda la familia trabajaba. Acorde a la BBC, en 1909, vendieron cerca de mil filtros, también llamados conos de café.
Al poco tiempo, trasladaron la creación del producto a una fábrica improvisada en el local de una antigua cerrajería. El negocio prosperaba, los clientes no paraban de llegar y, entonces, el 28 de julio de 1914, estalló la Primera Guerra Mundial.
Los conflictos armados involucran caos y destrucción. Hugo y Willy Bentz, esposo e hijo respectivamente de Melitta Bentz, fueron llamados al frente. El hermano de Melitta, Paul Liebscher, la ayudó a dirigir la fábrica. La cual, para lograr sostenerse en la adversidad, inició a producir cajas de cartón.
El 11 de noviembre de 1918, finalizó la Primera Guerra Mundial. Resultando victorioso el bando conformado por los Aliados: Francia, el Imperio británico y ruso, el reino de Italia y Estados Unidos. Mientras que el imperio Alemán estaba de lado de los perdedores. Sin embargo, Hugo y Willy Bentz regresaron a su hogar.
Saltando de obstáculo en obstáculo
Acorde a la nota “Melitta Bentz, la mujer a la que le debemos los filtros de café”, de la pluma de Claire Moses para el New York Times, en 1929, la fábrica de los Bentz en Desden era insuficiente para cubrir la demanda de producción. Se inauguró una nueva planta en Minden.
El negocio iba prosperando. Bentz instaló una serie de beneficios poco frecuentes para la época: redujo la jornada laboral a cinco días a la semana, otorgó vacaciones de 21 días, brindó bonos navideños e inició un fondo social para los empleados.
El 1 de septiembre de 1939, comenzó la Segunda Guerra Mundial. Los Bentz recibieron la instrucción de cesar la creación de filtros de café y ceder las instalaciones de la empresa, junto con la fuerza laboral, para fabricar suministros militares para el Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán de Adolf Hitler (NSDAP, por sus siglas originales).
El conflicto armado entre las potencias del Eje, encabezadas por la Alemania nazi, y las fuerzas de los Aliados, conformados por Francia, Reino Unido, China, la Unión Soviética y Estados Unidos, culminó el 2 de septiembre de 1945.
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En 1947, la empresa Bentz reanudó la producción de filtros de café y comenzó a apoyar a los sobrevivientes del Holocausto. Hoy, 94 años después de la apertura, la fábrica en Minden, Alemania, continúa abierta.
Los usas casi todas las mañanas, pero ahora ya sabes quién inventó los filtros de café y por qué lo hizo. Su nombre era Melitta Bentz, empresaria, madre de familia y ama de casa, quien buscaba una manera más cómoda y práctica de tomar una buena taza de café, sin tener que lidiar con los residuos de los granos molidos pegados al paladar. En el trayecto, lidió con dos guerras mundiales.
