Si en algún momento has pensado que eres adicto al helado, posiblemente tengas razón. Estudios han logrado determinar qué alimentos nos pueden generar cierta dependencia.
Como te podrás imaginar, se trata de la comida más deliciosa, la más práctica y muchas veces la más económica, pero también es la que más nos engancha y, como todo exceso, puede ser nociva para la salud.
¿QUÉ TAN POPULARES SON LOS ALIMENTOS GRASOSOS Y AZUCARADOS?
Un estudio de la Universidad de Michigan sugiere que algunos alimentos son realmente más adictivos que otros. Los investigadores encuestaron a personas sobre aquello que no pueden dejar de comer.
Según lo que encontraron, los alimentos que crean más dependencia suelen tener dos cosas en común: un alto contenido en grasas y una elevada carga glucémica, lo que significa que elevan el nivel de azúcar en sangre rápidamente tras su ingesta. Los alimentos con una alta carga glucémica suelen ser ricos en azúcares y carbohidratos refinados.
Seguramente ya lo sospechas, pero tu snack favorito está en la lista:
- Pizza
- Chocolate
- Galletas
- Helado
- Papas fritas
- Hamburguesas
- Refrescos
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Mientras tanto, los alimentos menos adictivos del estudio fueron:
- Pepinos
- Zanahorias
- Frijoles
- Manzanas
- Arroz
- Brócoli
- Plátanos
- Salmón
- Maíz (sin mantequilla ni sal)
- Fresas
COMIDA GRATIFICANTE Y AGRADABLE: POR QUÉ SENTIMOS ESO
La investigación muestra que comer grasas activa las regiones cerebrales implicadas en el gusto y el tacto, quizá porque los alimentos aceitosos y grasos se sienten bien en la boca. Es posible que la combinación del pico de azúcar en sangre, muy gratificante, con la agradable sensación en la boca de la grasa, cree el mayor potencial “adictivo” de un alimento.
La autora principal de la investigación, Erica Schulte, señala que, aunque en la naturaleza se pueden encontrar muchos alimentos con alto contenido en grasa, como los frutos secos, y con alto contenido en azúcar, como los plátanos, no se encuentra ningún alimento natural con altos niveles de azúcar y grasa.
“Esto subraya que los alimentos altamente procesados, como el chocolate y las papas fritas, pueden ser artificialmente gratificantes al contener altas cantidades tanto de grasa como de carbohidratos refinados de rápida absorción”, afirma.