La vida después de la muerte es una incógnita que ha acompañado a los seres humanos durante toda su existencia y el deseo de perdurar o ser eternos viene arraigado siempre al pensamiento de las personas.
De acuerdo con una encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), ante la contingencia sanitaria por Covid-19, las agencias funerarias crecieron hasta 47 por ciento sus servicios.
Durante febrero pasado, cuando la pandemia todavía no tenía presencia en México, una empresa grande de servicios funerarios prestó en promedio 351 servicios y para mayo, la cifra alcanzó los 516 servicios. Lo mismo sucedió con las funerarias consideradas micro, que, de realizar 12 servicios funerarios en febrero, crecieron a 16 en mayo.
La naturaleza de los servicios también cambió con la pandemia. El Inegi reveló que nueve de cada diez funerarias realizaron cambios en los protocolos de manejo de cuerpos durante abril y mayo y redujeron los tiempos y el cupo en los velatorios para evitar la propagación del virus, así como la implementación de servicios funerarios virtuales.
El Inegi detalló que cuatro de cada diez empresas realizaron cambios en los tiempos para velar cuerpos, 27.1 por ciento modificó los trámites, 26.7 por ciento aceleró tiempos de espera y 12.5 por ciento negó la prestación de servicio.
Entre las nuevas tendencias, la empresa Gayosso implementó una alternativa para apoyar a las familias cuando ocurre la muerte de un ser querido y se piensa en su eterno descanso. Se trata de los ecofunerales, también llamados entierros verdes, lo cuales se proponen cambiar las lápidas por frondosos árboles y crear espacios llenos de vida.
“El ecofuneral es una alternativa verde que consiste en que las cenizas del ser querido sean depositadas en una urna biodegradable y esta urna se coloque en la tierra junto con semilla y entonces, con el tiempo, crezca un ciprés italiano”, explicó a El Sol de México Alejandro Sosa, director de operaciones de Grupo Gayosso, empresa que ofrece este servicio en México.
“El ecofuneral es una alternativa para la despedida de los seres queridos, sabemos que la muerte es parte de la vida; sin embargo, cada persona y cada familia, de acuerdo con sus creencias y sus tradiciones, busca despedir de una forma distinta a su ser querido”, continuó.
El plan incluye un terreno a perpetuidad dentro los cementerios disponibles con mantenimiento incluido; una urna biodegradable, en la que se mezcla la semilla de un árbol ciprés italiano con las cenizas; una lápida grabada y el servicio de inhumación de las cenizas.
“El espacio es individual, a diferencia de las gavetas, que normalmente hay cuatro metros bajo tierra y se pueden depositar los restos para el descanso de cuatro familiares. En este caso es una sola urna ecológica y un solo árbol que crece. El área que se entrega a la familia o que incluye el producto del ecofuneral es aproximadamente de un metro cuadrado y en este caso es para una sola persona”, explicó Alejandro Sosa.
El precio del plan en Grupo Gayosso depende de la ubicación del cementerio, pero Sosa estima que en promedio, el paquete oscila entre los 30 mil pesos.
Además, el Plan Renacer es transferible, por lo que los espacios pueden ser ocupados por familiares o amigos.
El árbol va a dar oxígeno, va a tener pajaritos, va a dar vida. Es el concepto de ir hacia adelante, de ser eternosAlejandro Sosa / Directivo Grupo Gayosso
UN PROYECTO ECOLÓGICO
Alejandro Sosa agregó que los entierros verdes, además de lo ya mencionado, son benéficos para el medio ambiente, pues al adoptar esta nueva modalidad para el “eterno descanso” se contribuye a generar cementerios verdes, algo que solo era visto en las películas.
Además, refiere que estos espacios llenos de árboles producirán una estancia más cómoda a todos aquellos familiares que visiten a sus difuntos.
“El tener proyectos para despedir a seres queridos que incluyan elementos como árboles y áreas verdes siempre vendrán en beneficio de las ciudad, del medio ambiente y de la creación de oxígeno. Sin duda este tipo de proyectos nos benefician a todos para tener áreas verdes que sean dignas de visitar, que sea mayor oxígeno el que se produzca y, obviamente, al visitar a un ser querido en estos lugares se disfruta mucho más”, detalló.
“Podríamos entender conceptualmente el proyecto del ecofuneral desde muchos puntos de vista, por un lado desde la naturaleza, promover espacios verdes. El otro lado, que es ecológico gracias a la urna biodegradable”.
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