Antes de iniciar un Año Nuevo, las personas acostumbran comer 12 uvas durante las 12 últimas campanadas del reloj. A menudo los deseos van encaminados a la búsqueda de amor, salud, dinero y viajes. En otras ocasiones la ambición es aprender un nuevo idioma, finalizar los estudios o adquirir una propiedad. Se pueden anhelar muchas cosas, lo crucial es saber cómo conseguirlas.

¿Cuáles son tus 12 deseos de Año Nuevo?

¿Cuáles son tus sueños? No hay nadie más aquí, puedes contestar con honestidad. ¿Qué es aquello que buscas en la vida? ¿Cuál es el sentido de tu existencia? ¿En qué clase de persona deseas convertirte?

Es importante aclarar un punto: no todos los sueños se hacen realidad, pero igual vale la pena tratar de alcanzarlos. En palabras de Eduardo Galeano: “la utopía (el sueño de ser mejores) sirve para caminar”. ¿Hacia dónde deseas dirigir tus pasos? ¿Cuál es la meta que deseas alcanzar?

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Un proyecto de vida siempre es un proyecto individual, porque depende (en su mayoría) de la persona que lo planea. En opinión de Óscar Wilde, “solo existe la posibilidad de ser uno mismo, todos los otros opuestos ya están ocupados”. Solo tú, en compañía de tu conciencia y de tus anhelos, puedes decidir cuáles serán tus objetivos para el 2023.

Ve por una libreta, una pluma y siéntate a escribir. Es necesario plasmar los deseos en papel, es mejor que solo pensarlos.

Nosotros te ayudamos a conseguir tus propósitos

Una vez escritos tus 12 deseos para el Año Nuevo, es momento de realizar un diagnóstico, planeación, calendarización y seguimiento de tus objetivos. Vamos a ello.

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El blog de finanzas personales de BBVA, recomienda el método SMART: establecer metas específicas, medibles, alcanzables, realistas y temporales.

Metas específicas: define qué es aquello que deseas, por qué lo anhelas, para cuándo, dónde, con quién y cómo lo quieres.

Metas medibles: responde cuanto tiempo necesitas invertir para alcanzar un propósito. Este paso quizás conlleve un trabajo de investigación. Por ejemplo, los expertos aconsejan perder peso de manera gradual, un kilo por semana es la cuota estándar recomendada. Si buscas perder 10 kilos, debes esperar un mínimo de 10 semanas para ver cómo cambian los números en la báscula.

Metas alcanzables: una vez establecido el tiempo que te va a costar conseguir un objetivo, es importante cuestionarte si tales números son óptimos para tu condición actual. Siguiendo con el caso anterior, tal vez no puedas descender un kilo cada siete días, pero sí medio kilo, entonces, tu meta no son 10 sino 20 semanas.

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Metas realistas: estipula la viabilidad de tus deseos. Si deseas adquirir una propiedad, pero tu presupuesto es limitado, busca opciones en el mercado que se ajusten a tu billetera. Evita contraer deudas a largo plazo perjudiciales para tu economía.

Metas temporales: cada cierto tiempo debes evaluar tus progresos. Esto te va a ayudar a conocer qué tan cerca estás de cumplir tus objetivos o cuáles cambios precisas realizar para alcanzar tus propósitos. Recomendamos ampliamente el uso de una agenda o de un calendario para pactar y recordar las fechas.

En la vida siempre van a existir contratiempos, imprevistos y obstáculos que te van a alejar de tus deseos. No importa, si has perdido el camino, solo recuerda volver a él lo más pronto que puedas. También, reconoce tu esfuerzo, dedicación, trabajo y perseverancia durante todo el trayecto. En otras palabras, sé amable contigo mismo y valora tus resultados.

Los errores, el desaliento y el fracaso son parte del camino, son difíciles de asimilar, pero no son barreras infranqueables. Un año está conformado por 365 días, en alguna ocasión debes ganar, no es posible perder siempre.

Entonces, ¿cuáles son tus 12 deseos de Año Nuevo y cómo vas a conseguirlos? Recuerda el soneto 116 de William Shakespeare: “[Sé] un faro inmóvil que desafía las tempestades sin estremecerse”.