“En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme…”, esa frase da inicio a una de las obras literarias más reconocidas y vendidas alrededor del mundo.
A pesar de su popularidad, “El Quijote de la Mancha” de Miguel de Cervantes, se considera un libro difícil de leer. Nosotros no pensamos igual, te decimos cómo lograrlo en 100 días y no desistir en el intento.
¿De qué trata “El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha”?
La novela de Miguel de Cervantes Saavedra, narra la vida de Alonso Quijano, un hidalgo pobre de la región de la Mancha. Por su posición noble, Quijano no puede trabajar.
Sin nada más qué hacer, el hombre dedica su tiempo a consultar todos los libros de caballería a su alcance. En palabras de su autor: “del mucho leer y del poco dormir, se volvió loco”.
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El ama de llaves de la casa y la sobrina del hidalgo, en complicidad con el barbero y el cura de la villa, queman la biblioteca de Quijano en un intento por alejarlo de las letras.
Cuando el hombre busca sus libros, recibe la explicación de que un genio malvado prendió fuego a todas las historias. Como consecuencia, la demencia del personaje se incrementa.
Quijano decide tomar las armas y su caballo, abandonar su casa y a los suyos, para salir al mundo en búsqueda de aventuras. Su objetivo era amparar a los necesitados, vengar a los ofendidos y ayudar a nobles damiselas en peligro.
Su armadura estaba oxidada y su caballo desnutrido, pero él se veía a sí mismo como un caballero y tomó el nombre de Don Quijote.
Como es ley de la caballería, el tener un escudero, el Quijote reclutó a uno de sus vecinos como compañero de sus viajes. Un hombre analfabeto, propenso también a la vida contemplativa, no muy trabajador, de nombre Sancho Panza.
Él aceptó el ofrecimiento del Quijote, cuando este prometió darle el gobierno de una ínsula a cambio de sus servicios.
Estos dos lunáticos (dicho con toda seriedad) emprendieron el camino hacia lo desconocido sin muchas provisiones. Durante sus travesías fueron víctimas de burlas y atropellos, algunos se ampararon de su demencia, pero otros tomaron provecho para su propia diversión. La historia es alegre y cruel al mismo tiempo.
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Dentro de la misma novela, dividida en dos partes, se entrelazan otras tramas. Por ejemplo, la de la pastora Marcela. Una mujer de gran belleza, quien rechaza múltiples muestras de afecto, pues su ambición es dedicarse al pastoreo.
Uno de sus pretendientes, motivado por el desamor, se suicida. Ella es considerada culpable del hecho y busca defenderse.
Lee El Quijote de la Mancha en 100 días
Teniendo como referencia la edición del IV Centenario de la obra por parte de la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española, es posible leer el Quijote de la Mancha en 100 días.
En dicha edición, la Primera Parte del Quijote comienza en la página 27, mientras que la Segunda Parte culmina en la página 1106. En total son 1079 páginas. Si cada día de la semana se leen 20 páginas, se tendrían que invertir 53 días para concluir la obra.
Añadiendo a ese periodo, los días de descanso y considerando un margen de error, es factible leer la obra en 100 días. De hecho, no hay prisa, no es una competencia, esos 100 días se pueden convertir en 150, 200 e incluso en 365 días. Sea cual sea el tiempo, el resultado es el mismo: conocer el principio y el final de las aventuras de Don Quijote y Sancho Panza.
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El escritor Jorge Luis Borges decía que ninguna lectura es obligatoria, porque leer es un gusto y no un deber. Sus palabras fueron: “Si un libro les aburre, déjenlo, no lo lean porque es famoso. La lectura es una forma de felicidad”.
¿Cómo leer El Quijote de la Mancha en 100 días y no desistir en el intento? Con paciencia, voluntad y constancia, disfrutando de la lectura, estando dispuesto a internarse en “Un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme…”.
