Ni la vacuna Sinovac ni la Pfizer contra el coronavirus son efectivas contra la variante Ómicron, determinó una investigación de la Universidad de Hong Kong.
De acuerdo a los resultados del estudio, ninguna de estos biológicos, produjo niveles suficientes de anticuerpos para neutralizar la variante detectada por primera vez en Sudáfrica hace menos de un mes. Lo que se suma a los crecientes temores de que la variante pueda escapar a la protección que ofrecen las vacunas actuales.
TERCERA DOSIS, RECOMENDABLE
Los investigadores de la Universidad de Hong Kong recomendaron que la gente reciba una tercera dosis de las vacunas de Pfizer/BioNTech y Sinovac “lo antes posible”, con el fin de asegurar una mejor protección contra la variante de rápida propagación.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
En un grupo de prueba de 25 receptores de Sinovac con su esquema de dos dosis, el suero sanguíneo de ninguno de ellos indujo la respuesta de anticuerpos necesaria para neutralizar una infección por Ómicron.
Entre un grupo de 25 receptores de la doble dosis de Pfizer/BioNTech, únicamente cinco contaban con suficientes anticuerpos neutralizantes, lo que reducía la eficacia de la vacuna a un 20-24%, dijeron los investigadores.
“Se aconseja al público que reciba una tercera dosis de la vacuna lo antes posible mientras se espera la siguiente generación de una vacuna más adaptada”, sostienen en su estudio.
AMBAS VACUNAS SON LAS MÁS EMPLEADAS EN EL MUNDO
El estudio, que aún no ha sido revisado por expertos, coincide con lo que los fabricantes de vacunas Pfizer y BioNTech han dicho sobre su vacuna.
La semana pasada, las empresas afirmaron que una tercera dosis de refuerzo de su biológico aumentaba los niveles de anticuerpos contra la Covid-19 hasta 25 veces, lo que mejoraba las probabilidades de combatir la nueva variante.
En tanto que la empresa Sinovac aún no se ha pronunciado al respecto. La vacuna de fabricación china CoronaVac, es la más utilizada en el mundo contra la Covid-19. Se han distribuido casi dos mil millones de dosis en todo el mundo, especialmente en los países más pobres, como Indonesia, Brasil, Filipinas y Turquía.
En Europa, los resultados podrían suponer un problema para las autoridades de Albania y Ucrania, donde la vacuna Sinovac es una de las más utilizadas. También es una de las cinco utilizadas por México y a la fecha, el país ha recibido más de 7 millones de dosis.